Las mujeres que tienen la sartén por el mango

Megumi Rodríguez

Tiene solo 23 años , pero ya es jefa de pastelería y segunda en la cocina de Malabar.

Megumi Rodríguez cuenta que consiguió labrar su camino dado su interés de buscar oportunidades en el exterior desde el primer ciclo de carrera. “El mayor sacrificio fue irme a España. Estuve allá cuatro años en un restaurante de tres estrellas Michelin”, comenta la experta que tuvo a cargo diez practicantes.

Rodríguez reconoce que el país carece de pasteleras y cree que se debe a la dificultad para actualizarse. También indica que puede ser cuestión de dinero, pues estudiar gastronomía puede requerir un desembolso de S/ 2,000 mensuales.

Respecto a la presencia predominante de hombres, la joven resalta que aún vive en carne propia el estereotipo de ser el “sexo débil”.

Dalila Sifuentes

Es la única mujer con un cargo de liderazgo en Maido. Dalila Sifuentes encabeza el área de pastelería, conformada por cuatro personas.

La experta cree en la importancia de satisfacer al cliente: “Todos los días viene alguien intolerante a la lactosa, gluten o harinas y hay que cambiarle el postre; se personaliza”.

Sifuentes también resalta: “Es una satisfacción que ‘Micha’ diga que iré a un evento sola. Es gratificante, porque él tiene confianza en mí”.

Sin embargo, el ritmo del trabajo implica sacrificios en la vida familiar. La trujillana de 36 años cree que las mujeres son más detallistas y cumplen con más dedicación los controles de calidad: “En una inspección de limpieza, a mi área nunca me mandan un memorándum”, menciona.

Noelia Cárdenas

La actual chef encargada de pescados y mariscos Noelia Cárdenas se propuso ingresar a Central hace tres años, y para lograrlo entró hasta la cocina con su currículum en mano.

“Un cocinero que quiera trabajar en un restaurante de fama internacional debe tener decisión. Me presenté porque sentí que estaba capacitada para asumir cualquier rol ”, declara Cárdenas.

La cocinera de 31 años recuerda que sus primeras prácticas las hizo en un restaurante de comida criolla chinchana, donde aprendió los sabores base que emplea.

“Responsabilidad, creatividad y saber de dónde vienes”, enumera Cárdenas como las características básicas de un chef.