Giorgio Armani. A sus 85 años sigue al frente de la compañía que fundó en 1978. (Foto: AFP)
Giorgio Armani. A sus 85 años sigue al frente de la compañía que fundó en 1978. (Foto: AFP)

Necesidad de cambio. El imperio del diseñador Giorgio Armani lucha por tercer año consecutivo con la caída de sus ventas. Es por eso que el único accionista de la marca homónima ha decidido replantear el negocio. ¿Cuáles son los pasos que ha tomado?

Efectos de las primeras decisiones

A través de un comunicado de prensa, Armani admitió que sus ingresos cayeron un 8% (US$ 2,300 millones) en el 2018, frente a los US$ 2,500 millones del 2017. Además, según recoge el portal web Fortune, “las ganancias netas cayeron en más de la mitad a medida que la compañía aumentó el gasto y los ingresos por licencias disminuyeron”.

Es que “Armani sufre el impacto de su reorganización”, asegura el portal Moda.es. Un año antes, la compañía inició la simplificación de su portafolio para centrarse en solo tres firmas: Giorgio Armani, Emporio Armani y Armani Exchange. “El proceso se hizo efectivo en la primavera del 2018. Armani Collezioni y Armani Jeans se integraron en Emporio Armani y Armani Exchange, respectivamente”, detalla la web especializada.

Asimismo, Armani ha reorganizado su equipo directivo después de haber perdido la ola de creciente demanda de lujo en China, la cual fue aprovechada por sus rivales de la alta costura francesa como LVMH y Kering.

En marzo se reemplazó al gerente general Livio Proli por dos contrataciones internas. Se eligió a dos directores generales: Giuseppe Marsocci como responsable comercial y Daniele Ballestrazzi, al frente de finanzas y operaciones.

Estrategia de mira al futuro

Por otra parte, el año pasado se redujo el beneficio de la compañía hasta US$ 169 millones, frente a los US$ 270 millones del 2017. Ahora, el plan de la firma de moda es regresar a la curva de crecimiento en el 2020.

“Para apoyar su plan estratégico, la empresa incrementó un 28% su inversión, hasta US$ 106 millones”, revela Fortune.

Y, debido a que el efectivo neto aumentó a US$ 1,450 millones, “la compañía tiene importantes recursos para invertir en el relanzamiento de la marca”, apunta el medio estadounidense.

Para que Armani sobreviva en el tiempo, su director no descarta integrarla a algún consorcio financiero.


Sin dejar de lado nuevos proyectos

A pesar de la tormenta económica que inició en el 2016, Giorgio Armani continuó su plan de agregar proyectos para expandir el alcance de su marca.

Así, este año construyó un conjunto de apartamentos de lujo sobre su tienda insignia de la ciudad de Nueva York. También organizó su primer desfile en Tokio y firmó un acuerdo para proporcionar uniformes para el equipo nacional de fútbol italiano.

Además de las ventas que Armani genera en torno prendas de vestir y artículos de alta gama para el hogar, la compañía recibe ingresos por licencia para vender lentes producidos por EssilorLuxottica y fragancias y maquillaje en L’Oréal como Armani Beauty.


LA CIFRA

32 empresas de moda firmaron a favor del ambiente con lo que buscan reducir su impacto en el medio ambiente. Entre ellas se ubica Armani. El documento establece disminuir las microfibras de materiales sintéticos y promover una producción que no arroje productos químicos a ríos y océanos.

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