El que normalmente lleva un trajePara el hombre que por lo general usa ropa confeccionada a la medida, la clave es tratar a los jeans como un sustituto directo de los pantalones chinos. Un corte recto es vital: ni demasiado delgado (inadecuado), ni demasiado holgado (los jeans de papá).
El creativoNo es fácil lucir un denim doble con éxito. Los que lo logran tienden a ser del tipo creativo y seguro de sí mismos. Vestir un traje anularía su flujo artístico.
El que está listo para todo.A menudo vale la pena estar vestido para cualquier ocasión en caso suceda lo inesperado – el CEO llega sin previo aviso desde la sede global, o le piden que asista a una cena con un cliente y no tiene tiempo para cambiarse.
El que trabaja hasta el amanecer.Un hombre que trabaja bastante y se divierte aún más necesita un atuendo que fluye sin problemas entre los negocios y el entretenimiento. No te estás vistiendo para impresionar a tu jefe: este look más moderno es ideal para el trabajador que tiene un ojo en el reloj y el otro en su colega con quien saldrá a cenar una vez que llegue a la hora de salida.
El que le encanta los viernes casualMuchas oficinas tienen códigos de vestimenta informal – especialmente los viernes – pero informal no debe equivaler a desaliñado. Usted aún puede estar bien vestido con un look informal. Mientras más claro, arrugado y desteñido sea el jean, más informal será.