(Bloomberg).- Una camisa de cuello tirilla, más conocida como de cuello Mao o cuello mandarín, es el tipo de ropa que divide a los usuarios en bandos y no tanto algo que se usa como una prueba de fuego.

¿Es usted el tipo que encuentra alarmante enfrentarse con una camisa abotonada desprovista del familiar cuello inglés? ¿O es del tipo que agradece las nuevas alternativas al business casual de siempre, que le da la bienvenida al cuello Mao como el hermano más cosmopolita de la camiseta con botones?

[Etiqueta]

El modelo viene polarizando desde que existe. En el siglo XIX, la camisa de cuello tirilla era estándar, cuando la mayoría de los cuellos de las camisas de vestir eran desmontables. Pero usarlas en público podría provocar escándalo.

Incluso hoy, puede ser leído como una reliquia. El otro nombre que recibe, "camisa de abuelo", sugiere un aura de color sepia. Esta prenda se encuentra a gusto en los armarios llenos de chalecos de tweed, gorras de vendedor de diarios, y otros pertrechos resucitados de tanto en tanto por los mandolinistas de la bohemia chic.

[Etiqueta]

Pero últimamente los diseñadores han comenzado a transformar la camisa de cuello tirilla en algo más parecido a un mensaje desde el futuro, una prenda para Joaquin Phoenix en "Her", un terreno de ciencia ficción en el que las líneas entre el elegante y el nerdy se han difuminado. El tejido de este modelo rosa de tela Oxford, de Camoshita, por ejemplo, les hace gestos a los trabajadores tecnológicos de estilo colegial empeñados en alterar el discurso del sincorbatismo.

Si prefiere mantener la vibra histórica, sin embargo, pruebe la "sutil sensación retro" de una camisa larga de Cos. Una opción más audaz es la camisa rayada de Oliver Spencer que hace una apelación a lo retro sin caer en el traje.

[Etiqueta]

Otros nuevos modelos, como el cuello contrastante y botones de nácar en un diseño de Todd Snyder, inclinan la camisa en una dirección más formal. Vivienne Westwood, la pionera del punk devenida sacerdotisa de la alta moda, juega con los códigos de la formalidad ofreciendo un modelo con el cuello y los puños desmontables.

Tal vez usted tiene la personalidad adecuada para llevar uno con un traje liviano y mocasines sin calcetines. Si es así, envuélvase en un modelo de cambray y que tenga buen brunch.

Por Troy Patterson