A menudo los mentores obtienen de la mentoría más de lo que aportan a ella. ¿Por qué sucederá?

La tutoría en el sentido tradicional del término es una relación entre mentor y aprendiz donde el mentor proporciona orientación y dirección al aprendiz, que suele ser más joven.

Las organizaciones que cuentan con un programa estructurado de mentoría se benefician mucho desarrollando la cartera de talentos y estableciendo una estructura para transferir las habilidades de liderazgo formal. La retención de los empleados, la mejora de la comunicación y un compromiso demostrable por parte del empleador con el empleado son las ventajas de la tutoría.

Suena perfecto, pero ¿realmente lo es? Digamos que no del todo. Con una creciente brecha generacional y expectativas cambiantes, los líderes se enfrentan con nuevos desafíos. Si estos altos líderes quieren seguir siendo relevantes y avanzar en una era en la que los nativos digitales pronto representarán a la mitad de la fuerza de trabajo mundial y serán una fuerza con la que lidiar, tendrán que mantenerse en el borde "digital" de corte.

Esto es lo que hace el análisis de datos: recoge millones de puntos de datos y genera información que entiende el comportamiento del consumidor e impulsa las decisiones empresariales. Pero la analítica se utiliza principalmente para el cliente externo, no así con el cliente interno, su empleado.

Los líderes mayores llegan a conocer y apreciar la necesidad de nuevas maneras de comunicarse y las nuevas tendencias y los más jóvenes obtienen inestimables conocimientos sobre el panorama y el liderazgo.

Expuestos a nuevos comportamientos y motivaciones, los altos directivos pueden entender mejor lo que impulsa a la fuerza de trabajo más joven y cómo uno puede atraer lo mejor del talento. De esta manera las empresas pueden permanecer como empleadores y pueden participar con un importante segmento de clientes. Comprender lo que los hace "atractivos" hará que las empresas exploren nuevas ideas de marketing.

Cuando todo está dicho y hecho no se trata sólo de aprender nuevas herramientas, tecnologías y comportamientos. Hay que desafiarse a salir de la zona de confort y arriesgarse a aprender de quienes casi de manera innata se mueven por la red y las plataformas sociales que vertebran nuestra forma de comunicarnos y hacer negocios.

Forbes