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Impulsadas por la necesidad de garantizar suministros locales de vegetales frescos durante la pandemia, algunas granjas verticales ahora se están expandiendo a otras áreas de alto margen como el cannabis medicinal, los suplementos para la salud y los cosméticos.
La startup surcoreana Farm 8 Co. figura entre una proliferación de productores urbanos de interior que registró un aumento en las ventas durante el COVID-19. Busca aumentar las ventas en casi 50% a 90,000 millones de wones (US$ 79 millones) este año, en parte al impulsar la producción de plantas medicinales y cosméticas como el ginseng, la centella asiática y artemisa campestris, dijo el director ejecutivo, Kang Dae Hyun.
En agosto, la compañía se unió a la primera zona libre de regulaciones para el cannabis medicinal, el cultivo y el procesamiento de cáñamo para el cannabidiol (CBD) del país.
“Hay una demanda masiva de cannabis medicinal y el mercado está creciendo rápidamente”, dijo Kang en una entrevista. “La mayor parte de nuestra producción se dedica a vegetales de ensalada en este momento, pero en última instancia aumentaremos la producción de plantas cosméticas y medicinales para maximizar las ganancia”.
Más calidad
Otras granjas verticales también están utilizando la tecnología para satisfacer la creciente demanda de estrictos controles de calidad en aplicaciones médicas y cosméticas, como International Cosmetics Science Center de Dinamarca, Vertigo Farms de Polonia y MedMen Enterprises, con sede en California.
Farm 8 actualmente cultiva alrededor de 1.2 toneladas de vegetales por día en menos de 0.5 hectárea de tierra, repartida en tres ciudades de Corea del Sur, incluida una concurrida estación de metro en la capital del país.
Es uno de los principales productores locales de lechuga para cadenas de comida rápida, incluidos Subway Restaurants, Burger King Corp. y KFC Corp. Las ventas aumentaron 30% el año pasado.
Ese es el mercado tradicional para las granjas verticales: entrega garantizada de productos frescos de calidad controlada que deben llegar al consumidor rápidamente, independientemente del clima o la temporada. Esas ventajas se destacaron cuando las interrupciones al suministro por la pandemia y cosechas poco confiables impulsaron los precios mundiales de los alimentos a un máximo de seis años en febrero.
“Se necesita la cantidad adecuada de todo, desde agua hasta luz, y el clima debe ser perfecto, lo que es cada vez más difícil de predecir”, dijo Kang. “Comenzamos como una empresa agrícola tradicional hace 16 años, pero hemos aprendido a incorporar tecnología porque necesitábamos protegernos del cambio climático”.
Más energía
La agricultura vertical usa hasta 90% menos agua y reduce las emisiones causadas por el arado de los campos, la desyerba, la cosecha y el transporte, pero usa mucha más energía que los métodos tradicionales, lo que la hace inadecuada para muchos cultivos como los granos.
Los vegetales de Farm 8 crecen en bandejas hidropónicas de seis pisos, iluminadas por paneles LED, lo que permite a la compañía producir plantas dos veces más rápido que una granja convencional. Los niveles de luz, agua, temperatura, humedad y dióxido de carbono son controlados por robots que utilizan inteligencia artificial para evaluar los datos recopilados de las granjas.
Corea del Sur se convirtió en el primer país del este de Asia en legalizar el cannabis para uso médico en el 2018 y, en agosto del 2020, el Gobierno estableció una zona de libre comercio de cáñamo industrial en la ciudad de Andong, sureste del país, para desarrollar y extraer cannabidiol para uso médico con empresas privadas. La marihuana sigue siendo ilegal para uso recreativo en el país.
Además de cultivar y vender plantas, Farm 8 quiere exportar su sistema, que puede automatizarse completamente desde la siembra hasta la cosecha, a países de Medio Oriente y el sudeste asiático, dijo Kang. Espera firmar un contrato en Kuwait y recientemente envió un contenedor al centro de investigación de Corea del Sur en la Antártida.
La granja polar reemplazará una unidad más pequeña de 10 años y proporcionará 2 kilogramos diarios de chiles, zucchinis y pepinos, todos monitoreados de forma remota desde Corea.
El cannabis, por supuesto, se ha cultivado ilegalmente en interiores a pequeña y gran escala durante décadas, y la legalización gradual de la planta en algunos estados de Estados Unidos ha resultado en una gran cantidad de granjas verticales allí.
Pero la gran ventaja de la nueva tecnología para industrias como la cosmética y la medicina es la capacidad de cumplir con estrictas medidas de calidad.