Redacción Gestión

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Los cada año aumentan su cuota de alumnos latinoamericanos, pero ¿merece la pena ausentarse cerca de dos años para adquirir la competencias de una maestría de administración de empresas en el extranjero?

Para José Garrido-Lecca, director del PAD de la Universidad de Piura, el plan personal del ejecutivo es lo más importante a la hora de escoger la escuela de negocios: "La inserción en el mundo queda clara. Por eso, los profesionales requieren los conocimientos de lo que está pasando fuera, pero si se estudia 100% fuera o 100% en el Perú dependerá de las circunstancias personales de cada uno".

En ese sentido, Giuliana Leguía, directora de MBA de la Universidad del Pacífico, apunta que la clave para tomar la decisión es analizar el costo-oportunidad de cada alumno. Pues, la etapa profesional que vive dentro de su empresa le ayudará a decidir; así, es más fácil que se ausente cuando es joven que cuando es momento de asumir cargos directivos.

Entre los 26 y 30 años es la edad ideal para estudiar un MBA en el extranjero, señala Guillermo Quiroga de la Escuela de Posgrado de la UPC, quien asegura que la competencia en las instituciones más prestigiosas suele ser muy dura, con probabilidades de ingreso de 10 ó 12 a 1.

Una solución"Lo mejor de los dos mundos" es la solución que ofrece Garrido-Lecca. Esto es, optar por una escuela de negocios en el Perú que ofrezca programas para salir al extranjero y aprender de otras culturas o estudiar fuera en una institución que brinde internships en otros países, como el Perú.

En todo caso, los especialistas coinciden en que el reto de todo egresado de los MBA es la aplicación de las herramientas aprendidas. Por esto, conocer la realidad donde se va a desarrollar profesionalmente es indispensable para todos los ejecutivos.