Redacción Gestión

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Con el inicio del 2015 seguro muchas personas se han planteado muchas metas en su vida laboral: niveles de tolerancia a un trabajo o a una empresa que no te llenan, a tu jefe, o a una carrera profesional insatisfactoria están bajo mínimos, entre otros.

Irte de tu trabajo, de quien te manda o de tu compañía implica que evalúes el giro que estás a punto de dar. El cambio de sector o de profesión es una oportunidad, debes crear tu propia estabilidad laboral desarrollando un nuevo juego de habilidades transferibles y pensando a largo plazo, adelantándote a los cambios del mercado laboral.

Si tu objetivo es el cambio, debes aportar un nuevo valor y presentar nuevas credenciales profesionales, capacidades y habilidades completamente distintas y adaptadas al nuevo mercado de trabajo.

Debes tener en cuenta que cada vez más profesionales que persiguen un cambio buscan el trabajo de su vida en alguna ocupación o carrera que nada tiene que ver con lo que habían hecho hasta ahora.

Lo primero que has de valorar si decides lanzarte a esa gran transformación profesional es que la estabilidad en el empleo ya no tiene que ver con mantener el mismo trabajo en la misma empresa; ni en el mismo sector, o en la misma carrera. Tienes varias identidades profesionales y no debes aferrarte a una única.

1. ¿Sabes qué recompensa te hace ser fiel a tu empresa o trabajo? Contestar a esto –y estar bien seguro de ello– resulta fundamental cuando decides cambiar de actividad, compañía o carrera. Es un buen antídoto contra la frustración. Si la decisión de permanecer en un trabajo se basa en razones puramente económicas, no es de extrañar que decidas aguantar lo inaguantable, y que no te importe quedarte estancado.

Recuerda que el dinero no es suficiente argumento para el cambio. Aunque el elemento económico sigue siendo uno de los principales cuando se habla de motivación, su impacto es a corto plazo, y suele interiorizarse o se olvida. El salario, más que una motivación, es un básico, del mismo modo que lo es el lugar de trabajo o los recursos para desempeñar una actividad.

2. La forma de irte influirá en tu futuro profesional. Si decides marcharte o cambiar, no olvides algo muy importante: lo único que no abandona nunca un profesional es su marca personal. La forma de despedirte te perseguirá en otros trabajos y determinará tu futuro laboral. Si te vas mal, la consecuencia inmediata es el primer impacto que provoca en tu marca y en las empresas a las que luego podrías incorporarte.

*3. ¿Dominas las nuevas fórmulas para encontrar trabajo o cambiar de carrera? *Nunca debes empeñarte en aquello para lo que no estás dotado. Y debes estar bien seguro de qué quieres realmente en el trabajo que estás buscando; qué es para ti lo imprescindible y lo accesorio.

También resulta crítico que te plantees si realmente sabes buscar trabajo; si sabes vender tus aptitudes y si has utilizado los canales más adecuados para entrar al mercado laboral o cambiar de actividad, empresa o sector.

4. ¿Cuánto pesan las redes sociales en tu vida laboral? La pregunta es si la presencia y actividad en las redes resulta tan determinante como para abandonar o descuidar otras estrategias y herramientas tradicionales. ¿Será nuestra imagen en Twitter, LinkedIn o Facebook la única que recojan los reclutadores?

En todo caso, debes entender que se trata ante todo de la calidad del trabajo que seas capaz de mostrar en los medios sociales, la manera en la que los utilizas, y si puedes usarlos como correa de transmisión de lo que haces realmente. Si predomina la visibilidad personal por encima de tu realidad profesional y de la relevancia apoyada en hechos, cometerás un grave error.

5. Ten en cuenta los nuevos modelos de trabajo. La relación entre empleado y empleador ya no es de por vida. Aplica esto a tu búsqueda y descubrirás que implica la llegada de nuevos modelos de compromiso, de carrera y de fórmulas de trabajo: debes valorar la posibilidad de trabajar por proyectos, o tener en cuenta las posibilidades de empleo independiente que transforma de manara notable la manera en la que se entiende tu carrera o tu profesión.

Buscar empleo se ha convertido en una profesión muy complicada para la que hay que ser un verdadero especialista. En un entorno en el que no funcionan las soluciones tradicionales, fabricar el propio puesto parece una opción razonable para los que optan por algo distinto.