Dotmund, Alemania (AFP).- La policía alemana estudiaba este miércoles la posibilidad de que las tres explosiones que se produjeron el martes por la noche cerca del autobús donde viajaban los jugadores del Borussia Dortmund estén relacionadas con el islamismo.

El equipo, que regresó a los entrenamientos este miércoles, aseguró que no cederá al "terrorismo".

Por su parte el presidente del club Reinhard Rauball anunció que la operación de Marc Bartra, el jugador español herido el martes en el ataque , concluyó con éxito.

"Nos han informado de que todo finalizó con éxito", aseguró el dirigente a la televisión N-TV, acerca de la intervención que sufrió Bartra en su muñeca derecha, dañada por los cristales rotos tras las explosiones.

Según el periódico Süddeutsche Zeitung, las cadenas WDR y NDR, una carta encontrada en el lugar reivindica lo ocurrido "en nombre de Alá" y habla de la participación de Alemania en la coalición contra el grupo yihadista Estado Islámico (EI) así como del atentado en diciembre contra un mercado navideño en Berlín.

Según Süddeutsche Zeitung, los investigadores siguen siendo prudentes porque "es posible que los que cometieron el acto quisieran crear una pista falsa".Los investigadores están analizando una carta de reivindicación encontrada en el lugar pero no revelaron su contenido.

Según la agencia de prensa alemana DPA existe otra reivindicación del ataque que circula en internet y que se atribuiría un movimiento antifascista.

Refuerzan seguridadEl ataque contra el autobús ha obligado a reforzar la seguridad del partido Múnich-Real Madrid previsto este miércoles en el Allianz Arena de la ciudad bávara.

La seguridad ha sido reforzada y según el periódico Bild unos treinta policías con chaleco antibalas vigilan el hotel de los jugadores del Real Madrid. Los autobuses de los equipos están aparcados en un lugar seguro.

El duelo entre ambos se presenta con muchos alicientes por tratarse de dos gigantes del fútbol mundial, pero sobre todo por el enfrentamiento entre los dos entrentadores, Zinedine Zidane y Carlo Ancelotti.

El martes hacia las 19:15 horas estallaron tres explosivos al paso del autobús que llevaba a los jugadores al estadio de la ciudad para disputar un partido de cuartos de final de la contra el Mónaco.

Las explosiones rompieron una ventana del vehículo. El defensa español Bartra resultó herido en la muñeca y tuvo que ser operado. Otro policía que escoltaba el autobús en una moto también resultó herido con un traumatismo sonoro.

La UEFA, tras acordarlo con ambos equipos, decidió que el partido Borussia-Mónaco se jugará finalmente este miércoles a las 18:45 horas.

Tras la explosión los seguidores de ambos equipos abandonaron el estadio sin incidentes. Los cerca de 3,000 hinchas del Mónaco presentes en el recinto gritaron "¡Dortmund, Dortmund!" y cantaron La Marsellesa, aplaudidos por el público.

El entrenador del Dortmund, Thomas Tuchel, tenía previsto reunir de nuevo este miércoles a sus jugadores, que el martes por la noche volvieron a casa.

Las medidas de seguridad en la ciudad se reforzarán alrededor del estadio. Desde el atentado de diciembre pasado contra un mercado navideño en Berlín, en el que un vehículo arrolló a la muchedumbre dejando 12 muertos y 48 heridos, las medidas de seguridad en Alemania son muy altas.

El Dortmund, cuarto en la Bundesliga, y el Mónaco, líder de la liga francesa, son dos equipos comparables, ambos con talentos jóvenes y un fútbol ofensivo y rápido.