La inteligencia emocional: Comienza a enseñar (y aprender) ahora.

Los científicos de la Universidad de Cambridge afirman que la inteligencia emocional se puede aprender, debido a que el 90% de la empatía es la crianza, más que la naturaleza .

Sin embargo, la genética también participa en los niveles de inteligencia emocional . De hecho, la diferencia del 10% en la compasión de las personas se debe a los genes.

Científicos analizaron el EQ (Cociente de Empatía) de 46,000 personas, y encontraron una escasa relación entre este cociente y los genes, aunque también se descubrió que las mujeres son más empíricas que los hombres.

Esto podría deberse a motivos biológicos tales como hormonas relacionadas con la maternidad o podría deberse a la diferencia en la manera en que las mujeres y los hombres interactúan socialmente.

La investigación de la Universidad de Cambridge también podría ayudarnos a comprender mejor trastornos como el autismo.

“Descubrir que una fracción de por qué nos diferenciamos en empatía se debe a factores genéticos…”, mencionó el profesor Simon Baron-Cohen.

“Nos ayuda a entender a personas como aquellas con autismo, que luchan por imaginar los pensamientos y sentimientos de otra persona” remarcó.