matematicas
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A menudo, se dice que el es tierra de poetas. Sin embargo, un grupo de jóvenes peruanas podría estar en camino a cambiar ese dicho. Y es que ellas prefieren la precisión de la matemática para distinguirse y, también, resaltar el nombre del país.

Así lo demostraron en abril, cuando obtuvieron los primeros puestos en la Olimpiada Europea de Matemática para Mujeres. El concurso, que se realizó durante una semana, se desarrolló en la ciudad de Kiev, en . A pesar del nombre del certamen, participaron equipos de hasta 49 países de todo el mundo.

Hasta allá llegaron Carla Fermín Jiménez (14), Mónica Martínez Sánchez (17), Gladys Salazar Leiva (16) y Danna Vargas Chuco (14). Ellas estuvieron acompañadas por Jesús Zapata Samanez y María Laura Guevara, líder y vicelíder, respectivamente, de la delegación peruana que se enfrentó a 196 concursantes.

Medallistas

Los resultados han sido excelentes. Gracias a su esfuerzo, el Perú obtuvo tres medallas (una de oro y dos de plata) más una mención honorífica. Eso nos situó en el puesto nueve del ranking mundial, por encima de potencias como Japón, Francia, Alemania y Canadá.

En Latinoamérica, Zapata sostiene que el Perú es un referente. “De las últimas 10 olimpiadas de países del Cono Sur, Perú ganó ocho”, cuenta. Cabe resaltar, además, que esta es la segunda vez que el país participa en este torneo. En la primera, se obtuvo una presea dorada.

Esfuerzo y apoyo

Llegar a este nivel académico requiere más que ganas. Mónica Martínez, por ejemplo, sostiene que estudia seis horas al día. Acaba de terminar el colegio y ya se prepara para tener un lugar entre los futuros ingresos del . De otro lado, Gladys Salazar dedica 10 horas diarias a estudiar fórmulas y teoremas.

Su deseo es estudiar matemática pura en la PUCP. De otro lado, Carla y Danna, las menores del grupo, quieren estudiar Ingeniería Biomédica y de Software, respectivamente, cuando terminen la secundaria. Por ahora, además de los números, disfrutan leer libros de ciencia ficción.

Lo que viene

Lo conseguido por estas jóvenes fue gracias al apoyo de la Pontificia Universidad Católica, el Ministerio de Educación, el Instituto de Matemática y Ciencias Afines y los colegios Saco Oliveros y Prolog.

Sin embargo, Zapata Samanez indica que se necesita ampliar la convocatoria para que otros estudiantes de Lima y provincias puedan ser parte de los equipos peruanos femeninos y mixtos. “Somos un grupo de académicos que necesitamos apoyo en habilidades que no tenemos, como gestión, comunicación y marketing. Necesitamos un aliado que nos pueda institucionalizar”, señala el catedrático.

Asimismo, este tipo de resultados motiva a más chicas a participar de torneos como este, como le sucedió a Mónica Martínez. “Cuando participé por primera vez, ya había visto a chicas extranjeras ganar una medalla. ‘Si ella puede, ¿por qué yo no?’, me pregunté. Por eso queremos que las medallas que trajimos motiven a más chicas a decir ‘si ellas pueden, ¿por qué yo no?’”.

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