:quality(75)/cloudfront-us-east-1.images.arcpublishing.com/elcomercio/U2XP5ZTMHNGZXBTNDRGJEWXXFA.jpg)
María Claudia Medina
Hasta el año pasado, el consumo de bebidas alcohólicas per cápita en el Perú era de 79.4 litros por año, con la cerveza como la principal bebida (75.5 litros por año), seguida de lejos por el vino, según el Gremio de Importadores y Comerciantes de Vinos, Licores y otras Bebidas de la Cámara de Comercio de Lima (CCL).
Sin embargo, este año, por los efectos de la pandemia, el vino está mostrando un mayor protagonismo debido a su preferencia en el hogar.
“Entre todas las bebidas alcohólicas, el vino ha sido el preferido, por encima del pisco e inclusive la cerveza. Hay un fenómeno importante allí, también se nota la diferencia entre consumir vino y la coctelería”, explica Alina Santos, integrante del Comité Consultivo de la Unión Peruana de Sommeliers del Perú y Relaciones Públicas de Wines of Argentina en Perú.
Debido a su menor graduación alcohólica y su función de acompañamiento en los almuerzos, consideró que el vino tiene potencial para seguir incrementando su demanda.
En el mes de mayo, una encuesta realizada por Global Research Marketing (GRM), situó al vino como la bebida alcohólica más consumida por los limeños durante ese momento de la cuarentena, con el respaldo del 72% de los participantes.
“Todo lo que de alguna forma se ha perdido en el canal HORECA, de hoteles y restaurantes, por otro lado, se ha ganado en el consumidor directo. Una vez que el stock se acabó en el canal moderno, la gente no sabía dónde comprar y surgió una demanda insatisfecha. Tenemos a un consumidor que ha ido buscando a sus propios distribuidores y las formas de que le lleven el vino a su casa”, precisó.
Experiencia virtual
En el caso de Perú, observó que los precios de los productos adquiridos también se han ido reduciendo. Parte de este fenómeno se explicaría por el contexto económico, pero también, porque el cierre de eventos sociales genera menos demanda de productos de gama alta con fines de obsequio.
A propósito de la decimosétima edición del Expovino de Wong, que este año se llevará a cabo de manera virtual, comentó que la experiencia de catar vinos también se está volcando al formato virtual a través de videollamadas.
“La ventaja para el consumidor es que compra su vino de manera digital, se lo llevan a casa, y el día de la cata hay una videollamada y pueden participar otros miembros de la familia. Hace que la experiencia sea más integradora”, agregó Santos.
Para este año, el evento enológico de Cencosud, que se desarrollará del 24 al 26 de setiembre, tendrá una oferta de más de 50 bodegas de vinos, provenientes de Argentina, Chile, España, Italia y Perú.