Los 'doteros' entrenan por más de cinco años para volverse profesionales. (Foto: USI).
Los 'doteros' entrenan por más de cinco años para volverse profesionales. (Foto: USI).

Hace tiempo los dejaron de ser los haraganes de la casa. De hecho, es entretenimiento sano. En algunos países, hasta son profesionales.

Todo comenzó con StarCraft. Terminaban los años 90 y Blizzard decidió revolucionar el mundo. El juego de estrategia fue un boom global y marcó el inicio de los e-sports.

Sí, leyó bien: los videojuegos pueden calificar como e-sport. Hoy los frontrunners en esta categoría son y League of Legends. Pero vamos por partes. ¿Qué es un e-sport?

No cualquier juego califica en la categoría. Para obtener la etiqueta es que aquí requieres entrenamiento, un equipo de cinco contra cinco, y bastante dedicación. De hecho, estos gamers son profesionales.

Profesionales quiere decir que viven de ello. De hecho, el ex equipo peruano Infamous clasificó a The International (un evento de Dota 2 con más de US$ 20 millones en premios). Y este equipo ya facturaba US$ 90,000 en su último año de vida.

Camino gamer

Acá en Perú el fenómeno no pasa desapercibido. El mercado de los e-sports, y en especial de Dota 2, es inmenso. De hecho, .

Pero el tema del día no es este nicho, sino los jugadores. ¿Cómo se vuelven profesionales?

Según , gerente de Live Media, para llegar a ser un pro, deben pasar cinco años, por lo menos. Sí, lo mismo que una carrera universitaria.

Y no es descabellado ni una pérdida de tiempo. En el boom Starcraft, por ejemplo, el jugador promedio koreano ganaba más que el trabajador promedio en el mismo país.

El e-sport nacional es Dota 2. Este juego (al igual que todos los principales) es un MOBA, que significa Multiplayer Online Battle Arena; es decir, estadio de batalla multijugador en línea.

En pocas palabras, uno elige un personaje, arma un equipo con gente alrededor del mundo y enfrenta al equipo oponente hasta la muerte..., dentro del juego, por supuesto.

Los gamers peruanos tienen entre 14 y 25 años, y pueden jugar en un lan center (cabina de Internet especializada) o su propia casa. En el caso de los 'doteros' profesionales, la norma cambia.

"Los 'pro' tienen sus propios 'gaming house'. El dueño del equipo alquila una casa o departamento, y es aquí donde el equipo entrena, convive, duerme, estudia, etc.", explicó Carrillo.

Rompiendo paradigmas

El número de gamers en Perú seguirá creciendo en los próximos años, señaló. Y es importante dejar atrás los prejuicios relacionados a los videojuegos.

"El gamer no es el chico retraído que no quiere salir de su casa. Son chicos que estudian o ya se han graduado y que, simplemente, decidieron jugar videojuegos como su actividad de recreamiento", añadió.

Y este boom de los videojuegos, observó Carrillo, no solo se debe a que son divertidos, sino la misma seguridad que ofrece un lan center.

"Para los padres es una tranquilidad que los chicos se queden en casa jugando o en un lan center, porque saben dónde están", anotó.