El diamante azul, tallado en forma de pera y de 6.16 quilates, fue ofrecido a Isabel de Farnesio en 1715 como regalo de bodas cuando se casó con Felipe V. (Foto: Reuters)
El diamante azul, tallado en forma de pera y de 6.16 quilates, fue ofrecido a Isabel de Farnesio en 1715 como regalo de bodas cuando se casó con Felipe V. (Foto: Reuters)

Un diamante azul que perteneció a la que fuera la segunda esposa del rey Felipe V de España, Isabel de Farnesio, fue vendido por en una subasta de joyas nobles y magníficas por US$ 6.7 millones, superando ampliamente el valor en el que se había calculado esta histórica pieza.


La casa de subastas Sotheby's había estimado este diamante tallado en forma de pera y de 6.16 quilates entre US$ 3.5 millones y US$ 5 millones. La identidad del nuevo propietario de esta histórica pieza se mantiene en reserva.


"Hemos tenido resultados muy satisfactorios, especialmente en el caso del diamante Farnese (por el nombre de su propietaria original), mi favorito por su fantástica historia: 300 años en manos de miembros de la misma familia", comentó al término de la subasta la vicepresidenta para Europa de Sotheby's, Daniela Mascetti.


"Esperábamos buenos resultados, pero empezamos con US$ 3.5 millones y llegamos con US$ 6.7 millones. Esta pieza realmente ha superado nuestras expectativas", agregó.


El diamante fue obsequiado a Isabel de Farnesio en 1715 como regalo de bodas, en aquel momento España se había empobrecido por la Guerra de Sucesión y se ordenó a todas las colonias que enviaran regalos, especialmente joyas, para hacer un regalo a la nueva reina.


Fue así que una flota formada por doce embarcaciones cargadas de oro, esmeraldas y otras piedras preciosas salió de Cuba, pero diez días más tarde un huracán hundió la mayor parte de los barcos en el Golfo de Florida, salvándose sólo uno, precisamente el que transportaba el diamante.


Este había sido enviado por el gobernador de Filipinas, colonia española entre 1565 y 1821, como lo menciona una placa original pegada en el interior del estuche de la joya.


El diamante español fue el lote con el tercer precio más elevado de la velada, por detrás de un diamante de 51.7 quilates engastado en un anillo y que fue comprado por US$ 9.2 millones y que se convirtió en la pieza más cara de la subasta.


En segundo lugar quedó otro diamante de 50.9 quilates y también montado en un anillo, que partió por US$ 8.1 millones. "Había mucha agitación y alboroto en la sala y el resultado de los tres mayores diamantes ha sido muy satisfactorio", mencionó Mascetti.