La final se jugará en el estadio Monumental, el más grande del país y con capacidad para más de 50,000 personas.
La final se jugará en el estadio Monumental, el más grande del país y con capacidad para más de 50,000 personas.

La policía de Perú informó que coordinará con sus colegas de Brasil y Argentina para obtener información de las barras de Flamengo de Brasil y River Plate de Argentina que llegarán para asistir a la final de la Copa Libertadores el próximo 23 de noviembre.

El coronel Percy Tenorio, jefe de la unidad de servicios especiales y encargado de la seguridad de la final del torneo de fútbol, dijo a la prensa que “trabajará con la Policía Federal de Argentina y con la Policía de Brasil, y que nos permitan la información de quiénes están viniendo”.

La final se jugará en el estadio Monumental, el más grande del país y con capacidad para más de 50,000 personas.

Tenorio añadió el jueves que debido a los antecedentes violentos de las barras de ambos equipos, entre las más numerosas del continente, usarán un número mayor de agentes de los que suelen llevar para vigilar los encuentros del fútbol local.

“Vamos a tener que utilizar personal de franco (descanso) o de otras unidades administrativas para que nos apoyen en el servicio”, indicó el jefe policial sin mencionar cifras.

La violencia de las barras no es ajena al fútbol peruano.

El miércoles, grupos violentos de los clubes locales Alianza Lima y Universitario de Deportes se enfrentaron en una zona pobre de la zona este de Lima, con un saldo de dos muertos y cuatro heridos. El choque se produjo durante la noche en una calle del distrito limeño de San Juan de Miraflores. Los choques entre barras locales son frecuentes en zonas humildes sin mucha presencia policial.

La Conmebol decidió el martes mudar de sede la final de la Copa Libertadores, de Santiago a Lima, ante la oleada de protestas que persisten en la capital chilena.

Es la segunda vez consecutiva que el partido decisivo de la Libertadores debe cambiarse de sede. El año pasado, el cotejo de vuelta de la final, entre River y Boca Juniors, debió disputarse en Madrid. La decisión se tomó luego que hinchas atacaron con piedras y otros proyectiles el autobús en el que llegaban los jugadores de Boca al estadio de sus rivales acérrimos para disputar el encuentro. River ganó por 3-1 en el estadio Santiago Bernabéu de la capital española.

El día de la final de la Libertadores entre Flamengo y River coincidirá con otros cinco eventos musicales que concentrarán gran número de personas en otros estadios de Lima.