Unir lo mejor de dos mundos para que el resultado sea algo exclusivo y emocionante, aunque también algo delirante. Eso es lo que debieron pensar quienes decidieron conjugar en un excitante 'hot rod' un vehículo mezcla de camioneta Ford y motor Ferrari.

Un vehículo que pudo haber sido fabricado en realidad, ya que hubo un tiempo en el que Ford quiso comprar la marca del Cavallino Rampante para aprovecharse, entre otras cosas, de su tecnología y sus éxitos deportivos.

InnovaciónCon esa idea de historia-ficción de fondo, sus creadores tomaron como base una furgoneta Ford de 1932 sobre la que planificaron numerosas mejoras. La más importante: el montaje de un motor Ferrari de ocho cilindros en V de finales de la época de los 80.

Este propulsor de 3.0 litros de capacidad, montado en la prominente nariz del vehículo, sufrió además un emocionante retoque al incorporarle dos turbos, gracias a los que ahora es capaz de erogar 950 caballos de potencia.

El coche ostenta también asientos deportivos de última generación con cinturones de seguridad de cinco puntos de anclaje. No obstante, lo más privativo es el precio con el que sus dueños le pusieron a la venta: US$ 250,000, que ya han sido pagados por un coleccionista.

Red Iberoamericana de Prensa EconómicaDiario Expansión de España