AFP.- Alemania y Reino Unido anunciaron este martes más de 150 millones de euros en ayudas para luchar contra la deforestación de la Amazonía, principalmente para proyectos en Brasil, en un acto al margen de la Conferencia de la ONU sobre el Clima (COP23).

Alemania desembolsará 60.9 millones de euros (unos US$ 71 millones) en ayudas a los estados de Mato Grosso y Acre, dentro de un programa conocido como "ayudas condicionadas", en función de los resultados de la lucha contra la deforestación, explicó Florian Pronold, viceministro de Medio Ambiente alemán.

Otros 33.9 millones de euros irán a parar al programa brasileño Fondo Amazonas, en vigor desde 2008 y que es el principal instrumento de ayuda exterior para la preservación de los más de 5 millones de km2 de selva amazónica brasileña.

"Queremos reconocer esa voluntad política" del gobierno brasileño para la protección de la selva amazónica, explicó Pronold.

El Fondo Amazonas es alimentado por los gobiernos de Alemania, Noruega y Reino Unido.

Por su parte el gobierno británico entregará 62 millones de libras esterlinas (unos 81 millones de euros), con el mismo esquema de ayuda condicionada a resultados.

De esa cifra, 43 millones de libras irán a Mato Grosso y Acre, y 19 millones restantes para programas en Brasil, Colombia y Perú, detalló Kate Hughes, vicedirectora en el Departamento de Energía y Cambio Climático.

Los anuncios de nuevas ayudas financieras se produjeron en un acto del Fondo Amazonas con la participación, por primera vez conjuntamente, del gobierno brasileño, de los donantes, de gobernadores, representantes indígenas y de ONGs.

El ministro brasileño de Medio Ambiente, José Sarney Filho, recordó que las últimas cifras de deforestación indican un descenso del 16% en el periodo de julio de 2016 a agosto de 2017, tras dos años de crecimiento.

Las ayudas a Brasil se producen en un contexto de polémica en el gigante sudamericano, puesto que el gobierno anunció un recorte del 43% del presupuesto del ministerio de Medio Ambiente, aunque luego tuvo que dar marcha atrás.

Sarney Filho aseguró, citando nuevas cifras recién recolectadas por el ministerio, que en las áreas de protección federal en la región amazónica, el descenso de la deforestación ha sido aún mayor, del 28% (julio de 2016 a agosto de 2017).