Goodyear
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En el 2018, Goodyear ha presentado un peculiar prototipo de neumáticos. Se trata de un neumático revestido con musgo para generar, según el fabricante, oxígeno mientras circulamos.

A este nuevo concepto de neumático le han puesto el nombre de Oxygene, y lo presenta como una solución para unos desplazamientos urbanos más limpios. Con él, quieren poner énfasis en reducir el desperdicio de materiales, las emisiones y la pérdida de energía, aunque de momento no han dado detalles específicos sobre su funcionamiento, sólo unos conceptos generales.

"Con la previsión de que más de dos tercios de la población mundial viva en las ciudades en el 2050, la demanda de redes de transporte en entornos urbanos aumentará sustancialmente", dijo Chris Delaney, presidente de Goodyear Europa, Medio Oriente y África.

"Una infraestructura y un transporte más inteligentes y ecológicos serán cruciales para abordar los desafíos más acuciantes de la movilidad y el desarrollo urbanos", agregó.

Neumáticos que generan oxígeno y electricidad

Los neumáticos Goodyear Oxygene tienen una estructura abierta con musgos vivos creciendo dentro de su pared lateral. Esta estructura, junto al diseño de la banda de rodadura del neumático, hacen que la humedad y el agua de la calzada se deslice hacia el musgo para que este la absorba y haga la fotosíntesis.

De esta manera, y siempre según Goodyear, el musgo de las ruedas liberará oxígeno al aire según vayamos circulando.

Durante su fotosíntesis el musgo de las ruedas también debería inhalar CO2 del aire para alimentarse. Según la empresa, en una ciudad con cerca de 2.5 millones de vehículos esto supondría generar 3,000 toneladas de oxígeno absorbiendo más de 4,000 toneladas de carbono al año.

Pero claro, eso sólo en el caso de que todos esos autos utilizaran estos neumáticos, y tampoco han proporcionado ningún estudio para corroborar la información.

Goodyear asegura que el musgo de sus ruedas también generará electricidad mediante la fotosíntesis, y que esta sería suficiente como para alimentar sus componentes electrónicos internos. Estos serían una serie de sensores que recogen información sobre la calzada y neumáticos, y los enviaría al auto mediante un sistema de Li-Fi. O por lo menos eso es lo que quieren conseguir.

Además, la idea es fabricar estos neumáticos mediante impresión 3D, utilizando polvo de caucho de neumáticos reciclados para hacerlos aún más ecológicos. La estructura resultante sería liviana y capaz de absorber golpes, presentándose como una solución duradera e inmune a los neumáticos.

De momento es sólo un diseño conceptual
Pero como hemos dicho, se trata sólo de un diseño conceptual de los muchos que se muestran en Ginebra estos días, y que ha sido imaginado por el fabricante para el día de mañana. Esto quiere decir que es una idea que todavía está en las fases iniciales, y que en el mejor de los casos podría llegar dentro de unos años.

Tampoco han dado demasiados detalles técnicos para especificar los detalles del funcionamiento del musgo, ni la cantidad de CO2 que van a consumir y el oxígeno que liberarán. Por lo tanto, tampoco hay manera de saber hasta qué punto marcará la diferencia y conseguirá realmente hacer las ciudades más limpias. Habrá que esperar a ver si el diseño pasa de esta fase conceptual y es desarrollado por la empresa para tener más detalles.

Fuente: Foro Económico Mundial / Xataka