Deloire explicó por qué RSF ha presentado una denuncia en Francia contra la red social estadounidense a la que reprocha el incumplimiento de los compromisos con sus clientes para impedir la propagación de informaciones falsas y de mensajes de odio. (Foto: Olivier DOULIERY / AFP).
Deloire explicó por qué RSF ha presentado una denuncia en Francia contra la red social estadounidense a la que reprocha el incumplimiento de los compromisos con sus clientes para impedir la propagación de informaciones falsas y de mensajes de odio. (Foto: Olivier DOULIERY / AFP).

El secretario general de Reporteros sin Fronteras (RSF), Christophe Deloire, afirmó que Facebook permite que circulen por su plataforma tesis conspiracionistas o mensajes de odio con su inacción por puro interés comercial y financiero.

Deloire explicó por qué RSF ha presentado una denuncia en Francia contra la red social estadounidense a la que reprocha el incumplimiento de los compromisos con sus clientes para impedir la propagación de informaciones falsas y de mensajes de odio.

Por parte de Facebook -señaló-, lo que hay es el interés comercial de la compañía, el interés financiero. Si no, Facebook habría tomado medidas más fuertes”.

Hizo hincapié en que mientras la red social presenta “unos compromisos extremadamente fuertes en las condiciones generales de uso, con campañas de comunicación en la que dice que lucha contra la desinformación, que difunde informaciones fiables”, la realidad es diferente.

Una realidad -añadió- en la que las tesis conspiracionistas circulan, en la que los mensajes de odio se difunden masivamente, y en particular contra los periodistas”.

Por eso, el responsable de la organización dijo que se ha querido enviar “una señal” para que modifique el funcionamiento de su algoritmo y “restringir la propagación de mensajes de odio y de desinformación que ahora se están amplificando por el modelo de negocio de Facebook”.

El procedimiento abierto este lunes ante la Fiscalía de París, que busca la apertura de una investigación, se sustenta en una serie de informes que ponen en evidencia, entre otras cosas, que “Facebook constituye el principal foco de las teorías conspiratorias sobre las vacunas” para el público francófono.

Para Deloire se trata de que, más allá del riesgo judicial al que se puede enfrentar la empresa con una condena potencial, se exponga a un riesgo sobre su reputación.

Porque “esta denuncia nos permite también demostrar públicamente la brecha e incluso la contradicción completa entre los compromisos de Facebook y la realidad del funcionamiento del algoritmo”.

El secretario general subrayó que no basta con quedarse aquí, y que además de exigir que se apliquen las normas existentes, “hay que inventar la responsabilidad de las plataformas”, puesto que el derecho de las democracias concebido en el pasado no funciona para la nueva realidad digital.

Por eso RSF ha lanzado una iniciativa sobre la información y la democracia en la que están implicados 42 Estados de todo el mundo, incluido España, con la que se pretenden hacer recomendaciones concretas.