Bloomberg.- Tras décadas de desarrollo de redes cada vez más rápidas, que pueden transmitir vídeos de Beyoncé o dirigir coches sin conductor, el sector de las telecomunicaciones ha encontrado un nuevo campo de batalla: los sistemas más lentos de banda estrecha.

Vodafone Group Plc está creando una red sin cables que es lo suficientemente barata y sólida como para conectar artículos como cubos de basura o sensores en la tierra de los jardines a Internet, de tal forma que las compañías de basuras sepan cuándo mandar el camión y que las rosas reciban la cantidad precisa de agua.

El sistema, en Madrid, supone la vanguardia de lo que finalmente será una red global de Vodafone para el denominado Internet de las cosas (IoT): millones, quizá miles de millones, de dispositivos conectados diseñados para ahorrar tiempo y dinero a los negocios, y librar a los consumidores de tareas cotidianas.

Esta nueva red es más barata de operar que las habituales de móvil y wi fi, porque necesita menos potencia. Está diseñada para aparatos como contadores de gas o señales de tráfico luminosas que se registran esporádicamente, más que para coches autoconducidos o monitores cardíacos, que interactúan continuamente con la red.

"Será posible poner dispositivos que cuestan US$10 por anticipado y US$ 1.99 al mes en la mochila de un niño y olvidarse del asunto", ha declarado Varun Arora, vicepresidente de desarrollo de negocio en Greenwave Systems Inc., que diseña sensores y equipos de IoT para Verizon Communications Inc. y quiere trabajar con Vodafone. "Va a haber muchísimos ejemplos que a la gente no se le ocurren aún".

Para operadoras como Vodafone, estas redes suponen una forma de reemplazar los ingresos de los paquetes de llamadas y datos, que se están convirtiendo en productos estándar. Los partidarios de la red de banda estrecha de IoT ven hogares y vecindarios repletos de dispositivos, enviando señales por unos pocos céntimos al día gracias a baterías que durarán años.

¿Habrá demanda?Deutsche Telekom AG, Telefónica SA y NTT Docomo Inc. también están invirtiendo en banda estrecha para el Internet de las cosas. Pero no está claro si el esfuerzo merecerá la pena, opina Andrew Brown, director ejecutivo de empresa e investigación en IoT en Strategy Analytics Inc.

"Mejorar estas redes no es barato", comenta Brown. "Y, sin embargo, hay una carrera en este sentido entre las grandes operadoras".

BT está trabajando en su propio sistema de banda estrecha en Milton Keynes, 45 millas al norte de Londres, según Guillaume Sampic, director de estrategia de IoT de BT.

Dicha red recoge datos de sensores en carreteras, aparcamientos y señales luminosas para reducir los atascos en la ciudad. Aunque estos usos son útiles, nadie sabe aún si estos dispositivos tendrán éxito entre los consumidores, un dilema para las operadoras.