Mastercard implementará sistema de pagos sin contacto en Perú y América Latina, ¿qué plazos seguirá?

A partir de este año, Mastercard exigirá la actualización de una serie de tarjetas y terminales a lo largo de Europa, América Latina y Caribe, Asia Pacífico, África y el Medio Oriente para ofrecer la tecnología de pagos sin contacto con tarjeta a más personas y en más lugares alrededor del mundo.

Con el sistema de pagos sin contacto, los tarjetahabientes pagarán con solo “un toque” desde su tarjeta u otro dispositivo (billetera en celular, manilla, entre otros) en cuestión de segundos.

De esta manera, cada tarjetahabiente pagará con un "toque" de su tarjeta o dispositivo en estas regiones, todos los días pero ¿ese plan incluye al Perú?

Patricio Hernández, vicepresidente senior de Soluciones de Seguridad de Mastercard para América Latina y Caribe, mencionó que alrededor del mundo, la demanda de pagos sin contacto es sólida y va en aumento, ya que el 15% del total de compras se hace de manera contactless.

“Mastercard, que está presente en más de 210 países y territorios y opera en 150 monedas diferentes, asume el liderazgo del proyecto de pagos sin contacto para que se incremente en toda América Latina por medio de sus socios estratégicos, como bancos y adquirientes, que acelerarán la implementación de tarjetas y terminales compatibles con esa tecnología”, dijo.

En diálogo con Gestion.pe, precisó que el Perú forma parte de ese roadmap regional y se proyecta que, en cinco años, el 100% del ecosistema estará preparado para los pagos sin contactos.

“Desde hace un par de años Mastercard ha ido incrementando de manera más intensa y enfocada la adopción de los pagos sin contacto en Perú, y en los años por venir se espera que en el país incremente de manera constante el uso de la tecnología sin contacto para realizar compras de bienes y servicios”, mencionó.

El ejecutivo señaló que los países con ecosistemas robustos de pagos sin contacto experimentan una aceleración en la penetración de los pagos electrónicos.

“En los países de la región, una mayor prevalencia de pagos electrónicos tiende a dar un mayor impulso a la inclusión financiera y a la formalización económica. Además, los pagos sin contacto aceleran el proceso de adopción de pagos digitales”, comentó.

En ese sentido, puntualizó que, Mastercard ve una gran oportunidad para acelerar la adopción de pagos sin contacto, logrando esto a través de un trabajo conjunto con los bancos y adquirientes para implementar la tecnología contactless al 100% para el 2023.

“Para llegar allá Mastercard ha definido una hoja de ruta, y el primer gran hito es octubre del 2018, cuando todas las terminales nuevas que se habiliten en América Latina deberán aceptar chip EMV y la tecnología sin contacto”, dijo.

Subsecuentemente, a partir de abril del 2019, todas las nuevas tarjetas marca Mastercard emitidas en Perú y la región deberán contar con tecnología de chip EMV y sin contacto.

“Antes de abril de 2023, todas las terminales de comerciantes en América Latina y Caribe estarán habilitadas para aceptar tecnología chip EMV y sin contacto”, reveló.

¿Se evitarán robos?

Hernández refirió que las transacciones sin contacto benefician a millones de comerciantes y consumidores por igual ofreciendo seguridad y conveniencia.

Indicó que la velocidad de los pagos sin contacto, combinada con la autenticación dinámica EMV que protege contra el fraude, ofrece un espacio donde los tarjetahabientes compran seguros en cualquier lugar.

“Es importante resaltar los beneficios de la tecnología contactless: agilidad en los pagos, sobre todo en importes bajos, porque no hace falta teclear el PIN o firmar la operación, reducción del 50% de tiempo por transacción con respecto a operaciones habituales, mayor comodidad para el cliente y reducción del riesgo de manipulación de efectivo”, refirió.

Recordó que la tecnología sin contacto utiliza los mismos niveles de seguridad que la tecnología chip contacto que ha probado, a través de los años, ser la tecnología más eficiente para abatir el riesgo de clonación o falsificación al integrar complejos algoritmos criptográficos que mantienen un nivel de seguridad optimo en los medios de pago que utilizan tecnología sin contacto.