Redacción Gestión

redaccion@gestion.pe

Margo Schlossberg es propietaria de una tienda en línea de bolsos en Washington, la cual fue hackeada en septiembre. Cuando un usuario ingresa a para buscar su sitio web, le aparece una advertencia: "Este sitio puede estar comprometido".

En consecuencia, las ventas han disminuido considerablemente y solo, durante el mes pasado, el tráfico bajó en un 50%. "Es el peor momento para pasar por esto," se lamenta Schlossberg. "La temporada navideña es muy importante para mis ventas, pero ahora estoy en la 'lista negra' de Google".

En efecto, si la multinacional californiana pone en la denominada "lista negra" un sitio web "infectado", la marca que lo representa queda prácticamente fuera de Internet hasta que el problema detectado se solucione. Pero durante ese periodo las pueden presenciar una baja considerable en sus ventas e incluso pueden ver afectada rápidamente su reputación.

Lo que hace Google es escanear constantemente cerca de 60 billones de URL en busca de malware y phishing. De manera que un sitio web hackeado puede padecer consecuencias mayores si es clasificado dentro de "páginas infectadas".

En ese sentido, cuando una página dedicada al comercio electrónico es considerada sospechosa, la compañía puede decirle 'hasta pronto' a todos sus clientes, al menos, hasta que puede hallar una solución al problema.

Un artículo publicado por Fortune señala lo siguiente: "Google estima que etiqueta y pone en cuarentena 10,000 sitios web al día. No sólo examina los resultados de búsqueda de Google y los anuncios, también marca URL sospechosas escritas en los navegadores. El motor de búsqueda Bing, operado por Microsoft, trata a los sitios infectados de una manera similar".

La única manera en que el gigante tecnológico puede restablecer una página es comprobando si está limpia. Precisamente, para limpiar un sitio infectado, es necesario identificar el malware, encontrar la manera de eliminarlo, determinar dónde se originó el ataque, cambiar contraseñas para relanzar, por último, el sitio web cuando ya está limpio.

Una vez que todo ha quedado en perfectas condiciones, Google puede tardar hasta un día para restablecer el sitio. "No obstante a veces una empresa puede pensar que su sitio está limpio, pero la revisión de Google descubre lo contrario, por lo que el proceso puede alargarse" precisan desde Fortune.

Por ese motivo, los analistas sugieren invertir en la seguridad del sitio web para evitar estar en temida "lista negra" de Google.