El Fiscal General adjunto de EE.UU inculpó a 12 agentes rusos de inteligencia por el pirateo de correos electrónicos en plena campaña electoral (Foto: Reuters).
El Fiscal General adjunto de EE.UU inculpó a 12 agentes rusos de inteligencia por el pirateo de correos electrónicos en plena campaña electoral (Foto: Reuters).

En los últimos meses de la campaña presidencial estadounidense del 2016, se piratearon decenas de miles de páginas de correos electrónicos de altos dirigentes del partido Demócrata en un escándalo que conmocionó al país.

De acuerdo con la entonces candidata presidencial Hillary Clinton, el episodio fue una de las causas por las que el candidato conservador pavimentó su camino hacia la Casa Blanca.

Este viernes, el Fiscal General adjunto inculpó a 12 agentes rusos de inteligencia por el pirateo de esos correos electrónicos.

En una denuncia expuesta en un documento de 29 páginas, las autoridades judiciales estadounidenses delinearon la forma en que, según sus investigaciones, los agentes rusos accedieron a los e-mails.

El 19 de marzo de 2016, uno de los agentes rusos envió un mensaje falso al entonces director de la campaña de Clinton y dirigente partidario John Podesta.

El mensaje simulaba ser una alerta de seguridad de . Podesta accedió a un enlace del documento que lo llevó a una página web falsa de , donde él incluyó sus datos y su contraseña.

Durante meses, los piratas informáticos habían intentado acceder a los secretos de la campaña de Clinton, y con los datos obtenidos a través de Podesta crearon cuentas de correo que simulaban ser de miembros del equipo de campaña.

Un dispositivo similar atrapó datos de un funcionario del Directorio Nacional Demócrata, y seguidamente los hackers instalaron programas ocultos de espionaje en 33 computadoras que registraban cada tecla presionada.

Finalmente, en mayo de ese año (después de casi tres meses de pirateo), el partido percibió que había sido invadido, aunque los programas ocultos no fueron descubiertos hasta octubre de ese año.

Papeles al sol

De acuerdo con los documentos, los responsables del pirateo esperaron el momento oportuno para divulgar los documentos.

Finalmente, el 8 de junio lanzaron un sitio web, llamado DCLeaks, donde publicaron una primera tanda de correos electrónicos.

Por detrás de ese sitio web se situaba aparentemente un grupo identificado como Guccifer 2.0.

Entre fines de junio e inicios de julio WikiLeaks contactó a Guccifer 2-0 y le pidió acceso a "todo lo que tengan contra Hillary", para publicar esos correos antes de la Convención del partido que confirmaría su candidatura, en julio.

Finalmente, tres días antes de la Convención, WikiLeaks divulgó miles de mensajes electrónicos, con revelaciones que provocaron la renuncia inmediata de la entonces presidenta del partido, Debie Wasserman.

Finalmente, en el último mes antes de las elecciones de noviembre, WikiLeaks publicó nada menos que 50,000 mensajes de Podesta.

La consecuencia

De acuerdo con , su derrota electoral en el 2016 fue consecuencia de dos episodios.

El primero fue, siempre según Clinton, la decisión del entonces jefe del FBI, James Comey, de reabrir a una semana de las elecciones, la investigación sobre el uso que ella había hecho de un servidor privado de correos cuando era Secretaria de Estado. El segundo episodio, alega Clinton, fue la injerencia de Rusia.

"Yo estaba en camino a una victoria hasta que la carta de Comey del 28 de octubre y el WikiLeaks ruso crearon la duda en la cabeza de las personas que se inclinaban en mi favor, y quienes terminaron por tener miedo", comentó Clinton en el 2017.

La ex aspirante presidencial afirma estar convencida de que hubo contactos entre el comité de campaña de Trump y . En tanto, Trump considera que esa idea es una "ficción" y que la investigación que realiza el fiscal especial Robert Mueller no es más que una "caza de brujas".