Forpheus es el primer robot instructor de ping-pong del mundo y es capaz de evaluar el nivel de su contrincante hasta adaptar su modo de juego.

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El robot mide 2,7 metros de altura tiene forma de araña de tres patas. Utiliza un sistema de aprendizaje secuencial para evaluar las habilidades de su oponente, al que clasifica como principiante, intermedio o avanzado.

Por ello fue certificado con un Récord Guinness por ser el primer robot instructor de tenis de mesa.

Forpheus posee inteligencia artificial y está equipado con cámaras y sensores que le permiten adaptar su estilo de juego e incluso competir con jugadores inexpertos.

Fue fabricado por la compañía Omron, que busca promover el desarrollo mutuo entre el humano y la máquina.

El robot puede controlar la devolución de la pelota sobre la mesa de juego con una precisión de cinco centímetros y además posee tecnología 3D de reconocimiento de la bola.

Para ayudar a mejorar las habilidades de los principiantes puede devolver la pelota en ángulos impredecibles.