Edgar Guevara, director técnico del Centro Nacional de Operaciones de Imágenes Satelitales (CNOIS).

En setiembre del 2016 fue lanzado por primera vez , el primer satélite de observación terrestre de propiedad del gobierno peruano construido en Francia por la empresa Airbus Defence & Space, y que demandó una inversión de S/ 628 millones.

Desde entonces, la Comisión Nacional de Investigación y Desarrollo Aeroespacial (CONIDA) lo opera y transmite imágenes a diferentes entidades que las solicitan.

Edgar Guevara, director técnico del Centro Nacional de Operaciones de Imágenes Satelitales (CNOIS), detalló que actualmente son más de 130 instituciones las que piden dicha información.

“En este momento algunas de las instituciones que trabajan con imágenes satelitales son las científicas, como el Instituto Geológico Minero y Metalúrgico, el Instituto Geográfico Nacional, el sector Defensa, la Autoridad Nacional del Agua, entre otras”, explicó a Gestion.pe.

A ellas se suman entidades educativas, como la Universidad Tecnológica del Perú (UTP), que este año firmó un acuerdo de cooperación con CONIDA para promover la investigación aeroespacial.

“Para estimular ello, la agencia espacial ha puesto a consideración de la UTP que sea usuario para obtener imágenes y desarrollar proyectos que tengan que ver con la gestión del territorio, como la agricultura y la planificación urbana”, indicó Guevara.

Mirando al futuro

Al 2019, Guevara proyecta que más de 2,000 instituciones del Perú podrán acceder a las imágenes satelitales proporcionadas por Perú SAT-1.

“Es un objetivo bastante grande, pero cada gobierno local, cada comunidad, necesita imágenes para conocer qué está sucediendo en su zona, y eso se puede ver desde el espacio”, sostuvo.

El registro de imágenes que proporciona Perú SAT-1 ayuda en trabajos relacionados a la minería ilegal, en la gestión de riesgos relacionados a fenómenos naturales, en la estimación de la densidad poblacional, la evaluación de la agricultura, entre otros temas.

“El satélite peruano de observación terrestre tiene una resolución submétrica, por lo que con las imágenes compartidas muchas instituciones pueden empezar a desarrollar trabajos de aplicaciones específicas para su área. Las instituciones pueden consultar con nuestro catálogo y en el trascurso de dos o tres días ya tienen las imágenes sin invertir dinero”, explicó.