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La lideresa de Frente Amplio, Verónika Mendoza, aseguró que su partido decidirá de manera democrática y participativa su apoyo hacia alguno de los candidatos que pasaron a la segunda vuelta en las elecciones generales del último 10 de abril.
"Cualquier decisión que se tome en el Frente Amplio será de manera democrática y participativa, ya que no somos un partido político de cascarón", refirió la congresista que ocupó el tercer lugar de las preferencias electorales con 18.80%, aceptando tácitamente su derrota y el pase a la segunda vuelta de Pedro Pablo Kuczynski.
En conferencia de prensa, aseguró también que su organización política será una oposición firme y fiscalizadora. "El pueblo peruano nos ha dado un mandato, que sí vamos a honrar, es que seamos una oposición firme y fiscalizadora. Ese será el rol del Frente Amplio para estar atentos a denunciar todo acto de corrupción", indicó.
"Vamos a estar en las plazas con los jóvenes, las organizaciones sociales, los sindicatos, entre otros, con ellos va ser nuestra alianza por el país para eliminar la injusticia, la violencia y la discriminación", sostuvo la también congresista.
Además, recalcó que su partido político va a emprender un proceso con miras a trabajar en un nuevo pacto político contra la dictadura "fujimontesinista". "Un nuevo pacto político social contra todo lo que representó para nuestro país: asesinato, tortura, corrupción generalizada, esterilizaciones forzadas, entre otros. Eso no en nuestro país (por lo tanto) no va más", subrayó.
La parlamentaria dijo que promoverá una serie de debates en torno a la reforma del sistema político; la lucha frontal contra la corrupción; la restitución de la soberanía nacional; hacia una nueva ley general del trabajo y de igualdad ante la ley, así como el derecho decidir sobre proyectos de vida y territorios.