Redacción Gestión

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Caracas (Reuters).- El presidente venezolano, Nicolás Maduro, ordenó desplegar a unos 3,000 efectivos militares en las calles de Caracas para combatir la alarmante criminalidad, que encabeza las preocupaciones de los ciudadanos del país petrolero junto con la crisis económica y la inestabilidad política.

El plan "Patria Segura" es un nuevo intento por abatir a la inseguridad en uno de los países más violentos del mundo, tras el fracaso de casi una veintena de estrategias implementadas por una decena de ministros del Interior en los 14 años de Gobierno del fallecido .

"Nuestra Fuerza Armada Bolivariana va a la calle a proteger el pueblo. ¡Unión cívico-militar!", dijo Maduro en el acto de comienzo del polémico operativo, que en principio cubrirá las áreas críticas del estado Miranda que gobierna el líder opositor .

En Venezuela se registraron más de 16,000 asesinatos en 2012, unos 44 diarios o una tasa de 55.2 muertes por cada 100,000 habitantes, lo que supuso un incremento del 14% respecto al año anterior, según cifras oficiales. En los cuatro primeros meses de 2013 ya suman 3,400 homicidios.

Organizaciones no gubernamentales reportaron más 21,000 occisos el año pasado, mientras las autoridades acusan a los medios privados y a la oposición de magnificar el tema para crear una "sensación de inseguridad" por motivos políticos.

Sacar a los militares a las calles es un tema controvertido en la nación sudamericana y ha sido criticado por grupos de defensa de derechos humanos, que consideran al cuerpo castrense poco preparado para asumir tareas de orden público. "Esto puede generar potenciales violaciones a los derechos humanos", dijo la semana pasada la ONG Provea.

El propio Chávez quien impulsó algunos operativos temporales de seguridad con el Ejército solía criticar el enfoque represivo de gobiernos predecesores que utilizaban a los uniformados para sofocar manifestaciones o brotes de violencia.

"Esta es otra Fuerza Armada", se defendió Maduro el viernes en una entrevista con la cadena regional Telesur, financiada por el , cuando le preguntaron sobre la posibilidad de que los soldados cometan excesos.