(Reuters) El presidente Donald Trump dijo que retirará a Estados Unidos del histórico acuerdo mundial de 2015 para luchar contra el cambio climático, ignorando las peticiones de aliados y líderes empresariales y cumpliendo uno de sus principales compromisos de su campaña.

Quienes apoyan el acuerdo criticaron la decisión de Trump como una renuncia de Estados Unidos al liderazgo mundial, una tragedia internacional y un enorme torpeza de política exterior. Su predecesor, Barack Obama, lamentó el retiro de un acuerdo que ayudó a cerrar.

"Nos vamos", dijo Trump en una ceremonia en los jardines de la Casa Blanca, en la que criticó las "draconianas" cargas financieras y económicas del denominado Acuerdo de París. El mandatario sostuvo que lo decidido "representa una reafirmación de la soberanía estadounidense".

Trump señaló que comenzará negociaciones para reingresar al pacto global o lograr "un nuevo trato con términos que sean justos para Estados Unidos, sus empresas, sus trabajadores, su gente y sus contribuyentes".

Aliados de Estados Unidos expresaron su consternación con la decisión de Trump. Francia, Alemania e Italia rechazaron la sugerencia de que el pacto puede revisarse.

Estados Unidos se apartará así de casi todos los países del mundo en uno de los asuntos globales más apremiantes del siglo XXI. La salida lo unirá con Siria y Nicaragua como las únicas naciones fuera del pacto.

Estados Unidos, primeroTrump recurrió al lema de "Estados Unidos, primero", que usó en su campaña a la presidencia el año pasado. "Fui elegido para representar a los ciudadanos de Pittsburgh, no de París", dijo.

"No queremos que otros líderes y otros países se rían más de nosotros. Y no lo harán", agregó Trump. "Con el objetivo de cumplir mi solemne obligación de proteger a Estados Unidos y sus ciudadanos, Estados Unidos se retirará del acuerdo climático de París".

Estados Unidos fue uno de los 195 países que firmó el Acuerdo de París en diciembre de 2015, un pacto cuya aprobación fue impulsada en gran parte por Obama.

El acuerdo, que tomó años de negociación, compromete a países ricos y pobres a reducir las emisiones de los gases de efecto invernadero, que genera el uso de combustibles fósiles, y a los que los científicos culpan del calentamiento del planeta.

Obama expresó su pesar por la decisión. "Las naciones que sigan en el Acuerdo de París serán las que recojan los beneficios en empleos e industrias que se creen. Creo que Estados Unidos debería estar en el grupo de cabeza", indicó.

"Pero incluso en ausencia de un liderazgo estadounidense; incluso aunque este gobierno se una a un pequeño puñado de naciones que rechaza el futuro, confío en que nuestros estados, ciudades y empresas darán un paso adelante y harán más para liderar el camino y ayudarán a proteger el único planeta que tenemos para las futuras generaciones", agregó en un comunicado.

El presidente ejecutivo de Tesla Inc, Elon Musk, dijo que se retiraba de un consejo asesor de la Casa Blanca a raíz de la decisión de Trump. "El cambio climático es real. Dejar París no es bueno para Estados Unidos ni el mundo", escribió el empresario en un tuit.

El jefe de General Electric, Jeff Immelt, también se mostró desilusionado. "La empresa debe ahora asumir el liderazgo y no depender del gobierno".