asumió la semana pasada la jefatura de la Sunat, siete días antes renunciaba a su militancia a Fuerza Popular. El presidente Pedro Pablo Kuczynski negó que su ingreso al Ejecutivo responda a un acuerdo con el fujimorismo a cambio de obtener facultades legislativas desde el Congreso.

"No hay negociación, ni toma y daca", manifestó en Cuarto Poder. A renglón seguido indicó que su Gobierno busca incorporar a los mejores técnicos a los diferentes cargos del Estado.

Destacó la trayectoria de y su paso por el MEF. Esa experiencia, prosiguió, es la que llevó a Alfredo Thorne, ministro de Economía a nombrarlo como cabeza de la . Aunque PPK indicó que obviamente fue consultado.

"Si su corazón es poquito naranja; así es, lo importante es que sepa recaudar", añadió el Mandatario.

Y así como negó que haya habido un acuerdo con Fuerza Popular por la , también hizo lo propio por el caso del apoyo de un sector de su bancada para que Walter Gutiérrez asuma la .

Indicó que si la bancada de se abstenía, durante los próximos cinco años no se hubiera nombrado a un defensor.

Restó importancia al hecho de que un grupo de sus congresistas se abstuviera en la elección. "Por lo menos, no votaron en contra", añadió.

Agua y empresaKuczynski considera que debe haber una sola autoridad para reorganizar las 50 empresas públicas de saneamiento, las cual –según dijo– "no funcionan".

"La que mejor lo hace es Sedapal, el resto pierde casi el 50% del agua que procesan, alguien tiene que ser responsable, pues en sus directorios hay alcaldes que rotan todo el tiempo ", detalló.

La propuesta de frente a este problema es reducir el número de empresas. "Son 50 y tenemos 25 regiones", afirmó, para luego insistir que nos debemos quedar con la mitad de las que hoy hay.

Reiteró que los clientes que pagan puntualmente sus recibos deben ser premiados con algún descuento en sus cuentas.

Añadió que se debe buscar a los gerentes de las compañías públicas, a través de concursos para seleccionar a los mejores.

El caso GamarraEl jefe de Estado insistió en que el problema de Gamarra no es los textiles que llegan desde China a bajo precio, sino la crisis de Venezuela que era un importante comprador de sus prendas.

"Hay que mejorar la marca y calidad de nuestras prendas y buscar nuevo mercados", añadió.

PreocupaciónPor otro lado, reiteró sus dudas sobre el TPP, pues manifestó que este tratado excluye a China. Aunque reconoció que "comercialmente es bueno para el Perú".

"El hecho de que excluya a China, a la larga me preocupa. Valdría la pena investigar el área de libre comercio con Asia", agregó.