Lima (Reuters).- Perú condenó la amenaza del uso de la fuerza por parte de Estados Unidos en Venezuela y está negociando una declaración conjunta de respuesta con otros países de la región, dijo el canciller Ricardo Luna a Reuters el sábado.

Venezuela, que enfrenta una severa crisis política y económica con protestas antigubernamentales que han dejado 120 personas muertas, calificó como "un acto de locura" la amenaza estadounidense.

"Perú y algunos países de la región con mentalidad similar, condenan la amenaza o el uso de la fuerza no aprobado por el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas", dijo Luna.

"Todas las amenazas extranjeras o domésticas de recurrir a la fuerza socavan la meta de reinstaurar la gobernanza en Venezuela, así como los principios consagrados en la carta de las Naciones Unidas", agregó en un mensaje enviado en exclusiva a Reuters.

El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, amenazó el viernes a Venezuela con una posible "opción militar en caso de ser necesario", en respuesta a la crisis que vive ese país, tras afirmar que "la gente está sufriendo y está muriendo".

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El canciller peruano, quien reiteró su repudio a la dictadura venezolana, afirmó además que una "negociación de buena fe, con un claro objetivo y una fecha límite precisa, es el único camino aceptable para recuperar la democracia en Venezuela".

La oposición venezolana acusa al presidente Nicolás Maduro de ser un "dictador" que pone tras las rejas a sus rivales políticos y que quiere mantenerse como sea en el poder. El mandatario dice que los opositores de derecha están detrás de una "guerra económica" que busca desbancarlo.

Las autoridades venezolanas instalaron recientemente una Asamblea Nacional Constituyente, que tiene autoridad sobre los otros poderes del Estado, para reescribir la carta magna, en medio del rechazo de la oposición y de cuestionamientos internacionales.

"Es profundamente perturbador ser testigo de la grotesca destrucción del legado del libertador Simón Bolívar ante la demagógica represión (…) para consolidar una tiranía personal en el corazón de un continente que ha conseguido un nivel respetable de libertad y democracia tras décadas de lucha y sacrificio", agregó el canciller.