(Reuters) El candidato presidencial opositor de Ecuador oficiales del peleado balotaje del domingo en el que se impuso su rival socialista y dijo que los impugnará ni bien termine el conteo oficial, profundizando la polarización del país y allanando el camino para posibles protestas.

Guillermo Lasso, un ex banquero conservador de 61 años, protestó el domingo tras la rápida publicación de resultados por el Consejo Nacional Electoral (CNE), que marcaron una tendencia a favor del izquierdista Lenín Moreno.

La diferencia que separaba a ambos el lunes era de unos 230,000 votos. Con el 99.46% de las actas escrutadas, Moreno obtenía 51.17% de los votos frente al 48.83% de Lasso.

"Las pruebas de irregularidades en el proceso electoral son muchas. Por eso, no podemos reconocer los ilegítimos resultados", aseguró Lasso, ex presidente del Banco Guayaquil.

"Vamos a impugnar los resultados tan pronto se declaren oficiales. El objetivo es el recuento (pero) si en el recuento ellos ganan por un voto, nosotros lo reconoceremos", agregó pidiendo a sus simpatizantes protestar en paz.

Las agrupaciones políticas pueden impugnar los resultados en caso de disconformidad, según la ley ecuatoriana. Sin embargo, el proceso para dar trámite a esos pedidos podría llevar un tiempo por lo que la proclamación de Moreno se retrasaría.

"Advierto al mundo que se pretende instaurar un gobierno ilegítimo en Ecuador", dijo Lasso tras presentar su denuncia ante el jefe de la misión electoral de la OEA, el ex presidente de República Dominicana, Leonel Fernández. "La OEA no puede permitir que tome el poder quien no ha ganado las elecciones".

Pero el organismo continental dijo en un comunicado que sus observadores no hallaron discrepancias y que las denuncias deben ser tramitadas por el cauce institucional.

"La misión (de la OEA) comparó la información sobre los resultados recolectados por sus observadores en las JRV (juntas de votos) y aquella contenida en las actas publicadas por el CNE. Constató que no hubo discrepancias entre las actas observadas y los datos oficiales", sostuvo el organismo.

A pesar de los reclamos, algunos países de la región que no simpatizan con el modelo izquierdista, como México, Perú y Chile, saludaron el virtual triunfo de Moreno, un administrador de 64 años que se moviliza en silla de ruedas.

¿Resiste la izquierda?Los triunfos electorales de la centro derecha en Argentina, Perú y Paraguay y el cambio de gobierno en Brasil mostraron que, tras una década en el poder, la izquierda latinoamericana empezó a perder espacio en medio de una baja de los precios de las materias primas y fuertes denuncias de corrupción.

Las elecciones en Ecuador fueron un respiro para los dirigentes de izquierda de la región.

Por ello, los primeros en saludar a Moreno fueron los mandatarios de Venezuela, Nicolás Maduro, y de Bolivia, Evo Morales.

Pero el panorama no pinta sencillo para el próximo presidente que, desde el 24 de mayo, asumirá un país profundamente dividido y sumido en una crisis económica.

En época de vacas flacas por los bajos precios del petróleo, el nuevo mandatario tendrá que lidiar con un creciente desempleo, abultado endeudamiento público y corrupción enquistada en el poder.

A pesar de que la tendencia mostraba a Moreno firme en el primer lugar, la distancia de apenas 200,000 votos con Lasso demuestra el desgaste del modelo izquierdista y el descontento de la mitad de los ecuatorianos con las políticas de Correa.

Moreno, ex enviado de Naciones Unidas para Discapacidad, ofreció dialogar con todos los sectores, incluyendo la oposición, en un intento por recomponer la unidad de la nación, que agudizó su división durante la campaña electoral.