Redacción Gestión

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Washington (Reuters).- El secretario de Estado estadounidense, John Kerry, dejó en claro el viernes que Washington castigará al presidente sirio, , por lanzar un "brutal y flagrante" ataque con armas químicas que según un reporte reciente causó la muerte a más de 1,400 personas en suburbios de Damasco la semana pasada.

Kerry declaró que es esencial evitar que quede impune por el ataque, en parte como señal para aquellos que podrían considerar usar armas químicas en el futuro, y afirmó que Estados Unidos se había sumado a países como Francia, "nuestro aliado más antiguo", en su determinación para actuar.

"Lo más grave sería que no se hiciera nada", dijo Kerry en un comunicado desde el Departamento de Estado. "Lo más grave sería que el mundo expresara su condena y que luego no pasara nada", agregó.

El funcionario mencionó evidencia que, según dijo, muestra que las fuerzas de Assad estuvieron detrás del ataque y el divulgó un reporte de inteligencia al mismo tiempo que ofrecía muchos de los detalles.

El reporte señaló que el ataque del 21 de agosto mató a 1,429 civiles sirios, incluyendo 426 niños.

La información de inteligencia recabada para el informe incluyó comunicaciones interceptadas de un importante funcionario estrechamente ligado al ataque, además de otros datos a partir de contactos humanos, señales e inteligencia satelital, según el documento de cuatro páginas.

Francia dijo el viernes que aún respalda una acción militar para castigar al Gobierno de Assad por el ataque, pese a una votación del Parlamento británico que rechazó una ofensiva militar en Siria.

Un colaborador del presidente ruso , aliado cercano de Assad, calificó la votación negativa de Gran Bretaña que implicó un revés al esfuerzo de Washington de intervenir contra Assad como una evidencia de las preocupaciones europeas sobre los peligros de una reacción militar.

Damasco niega el uso de armas químicas y responsabiliza a los rebeldes que luchan hace dos años y medio por derrocar a Assad de los ataques con gas de la semana pasada.