Pleno del Congreso sesionará este 11 de agosto y se verá si pedidos de interpelación a ministros son admitidos. (Foto: archivo Twitter Congreso)
Pleno del Congreso sesionará este 11 de agosto y se verá si pedidos de interpelación a ministros son admitidos. (Foto: archivo Twitter Congreso)

El congresista , vocero de, señaló que los pedidos de interpelación a ministros impulsados por su bancada ya tienen el respaldo de otros grupos partidarios y es parte de la estrategia del Legislativo frente a un gabinete ministerial que insiste con mantener a figurar cuestionadas con el objetivo de agudizar la confrontación de poderes.

El también almirante en situación de retiro afirma que la estrategia del Parlamento se basará en citar ministros, empezando por los más cuestionados, antes de que vengan al pleno del Parlamento, fecha que sería el 23 de agosto, en que el equipo ministerial liderado por el premier asista a pedir el voto de confianza.

“Se han acercado otras bancadas a apoyar los pedidos de interpelación, pero no puedo dar sus nombres. Mañana (hoy) van a empezar a hacer la recolección de firmas, pero si se van a completar los requisitos o a lo mucho el miércoles en la mañana. El gobierno ha presentado un gabinete impresentable, y hemos dicho desde un principio que tenemos un espíritu de diálogo, ellos [Ejecutivo] han hecho caso omiso a nuestras sugerencias”, dijo.

Montoya precisó que a los tres primeros en citar al Parlamento serán al primer ministro, seguido por los titulares de la Cancillería y del Ministerio del Interior, Héctor Béjar y Juan Carrasco, respectivamente.

“En este pleno del jueves se van a atender esos pedidos y serán aprobados para que el premier vaya al Congreso cuando corresponda, que será la próxima semana. Estamos buscando la unidad de las fuerzas opositoras y vemos que cada vez hay más gente que se pone de acuerdo en ese sentido [de interpelar ministros] porque no se puede llegar al consensos con este Ejecutivo por la influencia de sobre el presidente y el premier Guido Bellido, que manipula el nombramiento de ministros”, afirmó.

Por su parte, Eduardo Salhuana, portavoz de , sostuvo que pese a que se está haciendo todos los esfuerzos para que Castillo y su primer ministro remuevan del cargo a algunos cuadros del gabinete, ellos “demuestran que no tienen un espíritu de enmienda” y es tarea del Congreso en su función de control político interpelar a los ministros.

“Estamos actuando con prudencia para evitar una imagen confrontacional del Congreso, pero pese a que hemos buscado los espacios de diálogo con el gobierno aún sigue la incertidumbre porque hay un silencio por parte del señor presidente Castillo sobre sus ministros, pudiendo él corregir algunas designaciones. Desde APP estamos de acuerdo en apoyar la interpelación a ministros si es que otra bancada presenta el pedido”, aseveró.

Mientras que Carlos Anderson, congresista de Podemos Perú (PP), indicó que es competencia del Parlamento citar a los ministros para que rindan cuentas sobre sus funciones, en referencia a los pedidos de interpelación.

“La palabra interpelación suena muy fea, pero es solo hacerle preguntas y no debe ser tomado como una acción de confrontación. Hay cosas que preguntar como los nombramientos en varios sectores que no tienen pies ni cabeza, como si fuera a llenar figuritas de un álbum y no tienen ningún tipo de lógica. El día de la interpelación vamos a saber si este gabinete tiene como estrategia insistir con este gabinete para buscar agudizar la crisis”, dijo.

Vacancia: la última carta

Por su parte, Montoya aseguró que la vacancia presidencial contra el jefe de Estado es la última carta que tiene el Congreso como herramienta constitucional en caso el gobierno busque disolver este poder del Estado para instalar su asamblea constituyente.

“Si creen que van a cerrar el Congreso no les será tan fácil. Nosotros lo vamos a defender y con éxito. La vacancia es una última opción, pero estamos apostando por el diálogo. La vacancia es un shock traumático para el país y no queremos eso”, indicó.

Para Anderson, aún es muy prematuro para hablar de una vacancia contra Castillo Terrones, pero si él pretende romper el sistema democrático, las instituciones como el Congreso tienen las armas para defenderlo.

“La vacancia siempre tiene que ser una última carta porque es una bomba nuclear en caso no se tenga otra opción y la democracia se vea en peligro. Las instituciones no pueden quedarse de brazos cruzados viendo como las arrasan”, puntualizó.