La propuesta del MTC también incrementa las multas a los conductores que superen los límites de velocidad. (Alessandro Currarino / GEC)
La propuesta del MTC también incrementa las multas a los conductores que superen los límites de velocidad. (Alessandro Currarino / GEC)

Con la finalidad de reducir la incidencia de accidentes de tránsito producidos por exceso de velocidad, el Ministerio de Transportes y Comunicaciones (MTC) elaboró un proyecto de decreto supremo que modifica algunos puntos del reglamento de tránsito, que ha dejado inconformes a varios gremios de transportistas.

El documento, al que accedió Gestión, plantea la disminución de los límites máximos de velocidad permitidos en calles y avenidas de zonas urbanas a nivel nacional. En el caso de avenidas, se contempla una reducción en la velocidad de 60 km/h a 50 km/h, mientras que en las calles el ajuste es de 40 km/h a 30 km/h.

También se especificó los límites de velocidad en carreteras que cruzan centros poblados y/o viviendas, zonas escolares o hospitales. En zonas comerciales la velocidad máxima será de 30 km/h, mientras que en zonas residenciales el límite es de 50 km/h.

En lo que respecta a zonas escolares y hospitales, la velocidad no deberá superar los 30 km/h.

“La autoridad competente debe señalar esos cruces”, agrega el texto.

Las multas

La propuesta también busca intensificar la sanción para aquellos conductores que no respetan los límites máximos o mínimos de velocidad.

Por ejemplo, el conductor que supera el límite máximo establecido hasta en 10 km/h adicionales recibirá una multa de S/79,200 (18 UIT). La sanción pecuniaria será de S/220,000 (50% UIT) si el límite de velocidad supera los 10 km/h hasta en 30 km/h adicionales, mientras que el monto se incrementará a S/440,000 (100% UIT) si se superan los 30 km/h adicionales.

Finalmente, el conductor que no respete el límite mínimo de velocidad establecido recibirá una multa de S/79,200.

El proyecto en mención estará disponible en la web del MTC para que sea analizado por los distintos gremios e instituciones del sector. Solo se recibirán aportes y comentarios hasta el próximo 12 de enero de 2021.

Fiscalización

Esta noticia no cayó nada bien en los diversos gremios del sector transporte, que han puesto algunas objeciones a la norma al señalar que es insuficiente.

El gerente general de la Asociación de Transporte Interprovincial de Ómnibus del Perú, Martín Ojeda, consideró que la propuesta no tendrá un real efecto si es que no va acompañado de la mano de una buena fiscalización.

“Hemos visto como los velocímetros son mal utilizados por las autoridades, se aprovechan en zonas donde saben que hay un cambio de señalética, lo hemos visto en la Costa Verde. Esta norma tiene que ir acompañada de políticas educativas y de fiscalización, de lo contrario no solucionará el problema”, dijo a Gestión.

Ojeda también recalcó la necesidad de realizar un verdadero estudio sobre los accidentes de tránsito en el país, así como hacer un recambio a las señaléticas viales, lo que ayudará a disminuir los choques de autos.

“Hay que ubicar esos  puntos negros, donde se producen más accidentes en el país, así como mejorar la señalética, que están entremezcladas. Una señal la coloca la región, otra el Gobierno y ahí hay un gran problema, genera confusión al conductor”, agregó.

Recaudación

Por su parte, el presidente de la Asociación de Empresas de Taxis Remisse del Perú (Aserper), Jesús García, consideró que la propuesta del MTC está más orientada a recaudar dinero producto de las multas, que hacer una labor de prevención.

“El MTC debería buscar la prevención y no la sanción, y ¿cómo lo hago? Pues instalando rompemuelles o gibas en las pistas, para que el conductor reduzca la velocidad. Pero como esta norma solo tienen el espíritu de recaudar, están apostando por lo fácil, colocar unas cámaras y listo”, cuestionó.

Si bien reconoció que reducir la velocidad podría ayudar a prevenir accidentes de tránsito, García dijo que aplicar una reducción solo de 10 km/h, tal como plantea el MTC, en la práctica no tendría ningún efecto.

“Por ejemplo, si se reduce de 100 km/h a 60 km/h, ahí sí obviamente hay una reducción notoria y, en caso de un eventual accidente, el impacto será menor y el porcentaje de fatalidad se reducirá”, anotó a este diario.