(Foto: USI)
(Foto: USI)

El enfrentamiento entre el fiscal general de Perú, Pedro Chávarry, y el equipo fiscal que investiga el caso Odebrecht y sus ramificaciones entre la clase política en el país se agudizó en las últimas horas, en medio de fuertes rumores de una inminente remoción de los investigadores de este proceso.

La tensión creció debido a que hoy se conoció a través de la prensa que Chávarry solicitó al fiscal superior Rafael Vela, que dirige las investigaciones, un informe sobre los "presuntos cuestionamientos" que existen sobre el acuerdo de colaboración que alcanzó la semana pasada con la empresa brasileña Odebrecht.

Este pedido, hecho por el secretario general de la Fiscalía de la Nación, Aldo León, a nombre de Chávarry, se une a otro que el Ministerio Público hizo el viernes último para que le pusieran al día por escrito sobre los 13 casos vinculados a la constructora que tienen en sus manos.

El equipo especial "Lava Jato", como se conoce formalmente al grupo dirigido por Vela, ya respondió una consulta similar hace menos de un mes.

Vela ha respondido pidiendo que se indique cuáles son esos "presuntos cuestionamientos" y recordó que los únicos que se conocen son los que planteó la congresista Rosa Bartra, del partido fujimorista Fuerza Popular, cuya líder, Keiko Fujimori, se encuentra en prisión investigada por presunto lavado de activos.

Bartra, quien presidió un equipo de investigación del Congreso que excluyó a Fujimori del caso Odebrecht, admitió tras ser presionada por la prensa que el pasado viernes visitó a Chávarry en su despacho, pero dijo que lo hizo para conversar de otros asuntos.

En ese contexto, Vela manifestó su "profunda preocupación" porque el fiscal general le solicite información sobre el acuerdo con Odebrecht, a pesar de que este tiene carácter reservado, y consideró que su equipo es víctima de una "nueva hostilización".

En los últimos días se han acrecentado los rumores de que Chávarry tiene prácticamente decidido retirar a Vela de la coordinación del equipo del caso Lava Jato y, con él, al fiscal José Domingo Pérez, quien lleva las investigaciones contra Keiko Fujimori y el expresidente Alan García.

Pérez ya tiene abierto un proceso disciplinario por haber declarado que Chávarry debe dejar el cargo, ya que se investigan sus presuntos vínculos con una organización criminal en la Judicatura conocida como "Los cuellos blancos del puerto".

Las denuncias contra Chávarry y los pedidos para su destitución e investigación han sido bloqueadas sistemáticamente por el Congreso, dominado por Fuerza Popular.

Al respecto, el director de la ONG Instituto de Defensa Legal, Carlos Rivera, declaró hoy al Canal N de televisión que la posición de Chávarry demuestra que "lo único que queda claro es que se busca la remoción" del equipo que lidera Vela.

Consideró que el fiscal general está buscando que Vela cometa algún error o desacato a sus funciones que hagan que la "destitución o cambio se vea como algo natural".

"Ese terreno es el que se ha ido preparando desde hace tiempo", sostuvo antes de agregar que no tiene "ninguna duda" de que la actitud de Chávarry está relacionada con la información que va a proporcionar Odebrecht desde enero sobre los sobornos y dádivas que dio a políticos y dirigentes nacionales en los últimos años.

El presidente Martín Vizcarra, también enfrentado con Chávarry, ya indicó que la destitución de Vela sería una mala señal en la lucha contra la corrupción en el país.

Entre la tensión y la expectativa, colectivos ciudadanos ya han anunciado protestas si es que se remueve a los miembros del equipo fiscal.

TAGS RELACIONADOS