Donald Trump volvió a mostrar su descontento con las acciones de la FED. (Foto: Reuters)
Donald Trump volvió a mostrar su descontento con las acciones de la FED. (Foto: Reuters)

Un ferviente partidario de Donald Trump fue arrestado y acusado el viernes de enviar 13 bombas a opositores del presidente de Estados Unidos, en un caso que mantuvo en vilo al país y avivó la tensión política a pocos días de cruciales elecciones legislativas.

Cesar Sayoc, de 56 años, un votante republicano registrado y con pasado criminal, nacido en Nueva York y que vivía en una camioneta llena de calcomanías a favor de Trump, fue arrestado frente a un centro comercial en Plantation, en el sur de Florida.

La camioneta fue confiscada y Sayoc, también conocido como Cesar Altieri, fue acusado de cinco delitos federales, incluido el envío de explosivos y amenazas contra un ex presidente, anunció el fiscal General Jeff Sessions.

Sus acciones, calificadas de "terrorismo interno" por todo el espectro político, podrían costarle hasta 48 años de prisión.

"Creemos que hemos atrapado al hombre correcto, pero aún hay muchas preguntas sin responder", dijo en rueda de prensa el director del FBI, Christopher Wray.

Los investigadores dijeron que las 13 bombas fueron enviadas por correo, muchas desde un centro del Servicio Postal en Florida, y que Sayoc fue identificado por sus huellas dactilares en uno de los paquetes.

"Estos actos terroristas son despreciables y no tienen lugar en nuestro país", dijo Trump en la Casa Blanca, elogiando a la policía por lo que llamó un "trabajo increíble", comparable con "encontrar una aguja en un pajar".

"Nunca debemos permitir que la violencia política eche raíces en Estados Unidos", afirmó. "Debemos mostrarle al mundo que estamos unidos en paz, amor y armonía como ciudadanos estadounidenses".

Los paquetes bomba fueron interceptados desde el lunes en medio de una tensa campaña para las legislativas de mitad de mandato del 6 de noviembre, vistas como un referendo sobre la gestión de Trump y los republicanos, que pueden perder el control del Congreso.

11 objetivos

Wray dijo que los artefactos, compuestos por un tubo plástico, un pequeño reloj, una batería y cableado, eran potencialmente "explosivos" y advirtió que "puede haber" más en circulación.

Los paquetes bomba, interceptados en Nueva York, Maryland, Florida, Delaware y California, fueron dirigidos a 11 personas, entre ellos el expresidente Barack Obama, la excandidata presidencial Hillary Clinton y el ex vicepresidente Joe Biden.

También fueron objetivos el multimillonario George Soros y la estrella de Hollywood Robert De Niro, así como el exfiscal general Eric Holden, los legisladores demócratas Cory Booker, Kamala Harris, Maxine Waters y Debbie Wasserman Schultz, el exdirector de la CIA John Brennan y el ex director de inteligencia nacional James Clapper.

Los destinados a Clapper y Brennan fueron enviados a la CNN, una cadena critica con el gobierno de Trump. Biden y Waters recibieron dos paquetes cada uno.

Trump

Trump, que ha hecho duros comentarios en el pasado sobre los destinatarios de las bombas, negó que su retórica incendiaria pueda haber motivado al sospechoso, de quien reconoció su adhesión republicana.

"Escuché que era una persona que me prefería sobre los demás", dijo a periodistas.

Trump rechazó tener "culpa" por el incidente, a pesar de haber sido cuestionado por su tibia respuesta y sus acusaciones a los medios de provocar "ira" en la sociedad.

"Los medios de comunicación han sido increíblemente injustos para los republicanos, los conservadores y, desde luego, para mí", dijo el viernes.

"Pero con todo lo que se dice, estamos ganando. Así que eso me gusta".

Más temprano en Twitter, el mandatario deploró que este incidente afecte el buen desempeño electoral de los republicanos.

"A los republicanos les está yendo tan bien en la votación temprana, y en las encuestas, y ahora suceden estas cosas de 'Bombas' y el ímpetu se desacelera en gran medida: los informativos no hablan de política. Muy desafortunado lo que está pasando. Republicanos, ¡salgan y voten!", escribió.

El FBI dijo que es "demasiado pronto para hablar sobre los motivos" del sospechoso. "Nos preocupa que se cometan actos de violencia por cualquier motivo", se limitó a decir Wray.

Obama con una X roja

De Niro, mordaz crítico de Trump, agradeció que no haya habido heridos por estos incidentes y aprovechó para urgir a los estadounidenses a votar.

"Hay algo más poderoso que las bombas, y ese es su voto", dijo el dos veces ganador del Óscar.

Todos los paquetes fueron enviados en sobres de papel manila con interior de plástico con burbujas, etiquetas de dirección impresas en computadora y seis sellos con la bandera estadounidense.

El remitente era el mismo: Debbie Wasserman Schultz, legisladora de Florida y expresidente del Comité Nacional Demócrata, quien el viernes dijo a reporteros estar "devastada" y "fuertemente conmocionada" por estar involucrada así.

Las direcciones incluían errores ortográficos en los nombres de Clinton, Obama y Waters. El paquete destinado al expresidente incluía una fotografía de Obama marcada con una X roja, según la denuncia penal.