Detención de Keiko aumentaría tensión, pero no amenazará a Martín Vizcarra

La mayor consultora mundial de riesgo, Eurasia Group emitió un informe luego de conocerse que la lideresa de Fuerza Popular, Keiko Fujimori, fuera detenida ayer por diez días como parte de una investigación por presunto lavado de dinero.

El reporte “Detención de Keiko podría aumentar tensiones políticas, pero no amenazar a Vizcarra”, fue elaborado por María Luisa Puig.
Puig recuerda que la decisión del juez para la detención se da en un contexto en el que las investigaciones sobre las actividades de Odebrecht en el Perú continúan desarrollándose.

Así, menciona que el expresidente Ollanta Humala (2011-2016) y su esposa Nadine Heredia pasaron varios meses en prisión preventiva. Asimismo, los expresidentes Alejandro Toledo (2001-2006), Alan García (2006-2011) y Pedro Pablo Kuczynski (2016-2018) también están bajo investigación.

“No estamos en posición de evaluar los fundamentos legales de la detención de Keiko o si esta fue motivada políticamente, ya que el sistema judicial del Perú está en el centro de un importante escándalo de corrupción que involucra a los principales jueces y políticos, lo que plantea dudas sobre si esta decisión podría haber sido influenciada políticamente”, señala el reporte de la consultora global de riesgo.

Sin embargo, Puig también señala que el juez que ordenó el arresto de Keiko también puso a su ex rival Humala en prisión a principios de año, decisión aplaudida por sus partidarios en ese momento. El mismo juez (Concepción Carhuancho) solicitó la extradición de Toledo, también su oponente.

Impacto de la detención

Para Eurasia Group, “el arresto de Keiko aumentará aún más la confrontación entre el Poder Ejecutivo y el Congreso, en el que Fuerza Popular tiene 62 de los 130 escaños. La semana pasada, las tensiones volvieron a estallar después de que un juez anuló el indulto otorgado por Kuczynski al padre de Keiko”.

Pero además, acota el reporte, Vizcarra ha dicho que respetará la decisión de anulación del indulto, mientras que Keiko culpa a sus enemigos políticos. Ayer tras su detención dijo que es víctima de persecución política.

“Es poco probable que una mayor confrontación afecte mucho la perspectiva de la política (en Perú). Las reformas políticas y judiciales prioritarias de Vizcarra ya se aprobaron en el Congreso, aunque con algunos cambios, y probablemente se aprobarán en un referéndum en diciembre”, señala Puig.

Cuestión de empleo

Sin embargo, “las tensiones continuarán representando un riesgo para la estabilidad, pero es poco probable que el caso en sí amenace la permanencia de Vizcarra. Primero, los legisladores actualmente carecen de justificación para buscar su juicio político (aunque probablemente estén duplicando los esfuerzos para encontrar uno). En segundo lugar, carecen de apoyo popular para tal movimiento”, remarca el informe de Eurasia Group.

Puig además recuerda que situación de Keiko se ha debilitado gravemente en los últimos meses y su aprobación llega a 13%. Lo mismo sucede con el Congreso.

En este contexto, el reporte dice que “los legisladores también carecerían de incentivos para celebrar elecciones anticipadas y correrían el riesgo de perder sus empleos. Por el contrario, algunos de ellos probablemente han comenzado a evaluar la realineación con otros grupos a medida que el futuro político de Keiko se vuelve más incierto”.