Keiko Fujimori está en la audiencia al lado de sus asesores Pier Figari y Ana Herz. (Foto: Poder Judicial)
Keiko Fujimori está en la audiencia al lado de sus asesores Pier Figari y Ana Herz. (Foto: Poder Judicial)

El ex procurador anticorrupción César Azabache señaló que la actuación del fiscal José Domingo Pérez Gómez y del juez Richard Concepción Carhuancho no permite sustentar una persecución política, tal como sostiene la defensa de Keiko Fujimori y de los otros implicados en el caso “Cócteles”.

“Este no es un caso de persecución política pero sí podemos notar que el sistema está en una tensión muy importante, entre desbordarse e inclusive exponerse en llegar a límites a los que no debería”, refirió.

Sin embargo, Azabache mencionó que en el caso "Cócteles" la Fiscalía está mostrando un set de evidencias que es sumamente importante pero en lugar de proceder a presentarlos en un juicio lo hace en una audiencia de prisión preventiva.

“Un texto de 600 páginas que casi en su totalidad se refiere a inocencia o culpabilidad podría hacer un buen papel para una acusación pero no es necesariamente un buen texto para pedir una prisión preventiva”, anotó.

Recordó que el Código Penal del Perú le permite a un fiscal, en condiciones como la del caso Cócteles, empezar a monitorear y vigilar a las personas involucradas e intervenir sus teléfonos y comunicaciones.

“El fiscal tiene derecho a pedir prisión preventiva si encuentra una comunicación telefónica en la que dos personas empiezan a complotar sobre cómo inducir a los testigos o controlarlos, ahí viene la prisión preventiva. Cuando se encuentra que dos personas empiezan a negociar o coordinar cómo escaparse del país o cómo respaldar a alguien que se está escapando o proteger la fuga de alguien, ahí viene la prisión preventiva”, manifestó.

Sin embargo, mencionó que estos supuestos no han sido presentados por la Fiscalía.

Asimismo, indicó que el juez Richard Concepción Carhuancho no eligió una buena fecha para realizar la audiencia sobre el pedido de prisión preventiva contra Keiko Fujimori y otros 11 investigados por el caso “Cócteles”.

Explicó que en caso de los pedidos de prisión preventiva, la audiencia se programa con carácter de urgente cuando el requerido está en la cárcel pero cuando el requerido está libre entonces no es determinante fijar pronto una fecha.

“Hay una recusación de por medio, el pedido de recusación está vez no es absurdo y la sala superior ha dicho algo serio como que el juez violó las reglas de su deber proceder al coger un trozo entero del pedido de la Fiscalía y convertirlo en una resolución, eso es muy serio”, anotó en RPP TV.

En ese sentido, consideró que lo más transparente habría sido que se discuta primero el pedido de recusación y luego entrar al debate del pedido de prisión preventiva.

Opinó que Concepción Carhuancho debería apartarse del juicio que se le sigue a Keiko Fujimori por el caso “Cócteles” para mantener la ecuanimidad del procedimiento.