Bloomberg.- La confianza de los hogares del Reino Unido cayó a su nivel más bajo desde la votación sobre el ya que un mayor coste del nivel de vida y unas elecciones generales no concluyentes están frenando el gasto de los británicos en artículos importantes.

El índice de confianza del consumidor GfK ha caído a menos 10 (-10) este mes desde menos 5 en mayo, dijo la firma de investigación de mercado.

Según la encuesta a 2,000 británicos, llevada a cabo antes y después de las elecciones del 8 de junio, la actitud de los consumidores hacia la economía y las finanzas personales se deterioraron.

Un indicador de la propensión a realizar compras importantes también se hundió a los niveles más débiles desde el referéndum sobre la pertenencia a la Unión Europea (UE) hace un año.

Los resultados apuntan a una continua presión sobre el gasto del consumidor, el motor de la economía británica. La primera ministra británica, Theresa May, depende ahora del apoyo de un partido de Irlanda del Norte para mantenerse en el poder ante el inicio de las complejas negociaciones con la UE, y los hogares se enfrentan a una mayor incertidumbre política en un momento en que el aumento de la inflación por la debilidad de la libra erosiona los ingresos.

La encuesta "revela una fuerte caída en la confianza de los consumidores en todas las mediciones", dijo Joe Staton, director de dinámica del mercado de GfK.

"Las dos presiones, de precios más altos y lento crecimiento de los salarios, están afectando la economía de los hogares y aumentando los temores generalizados de una desaceleración económica provocada por el Brexit".

La caída de junio deja al índice de confianza total muy cerca del mínimo post-referéndum del año pasado, lo que refleja el sentimiento negativo de los consumidores sobre su situación económica personal y las expectativas para la economía en general, dijo Staton. GfK llevó a cabo la encuesta entre el 1 de junio y el 15 de junio.

En otro informe publicado el viernes, Lloyds Bank Commercial Banking dijo que la c onfianza empresarial subió este mes y la intención de contratación se fortaleció "significativamente", citando una encuesta de 300 empresas.

No obstante, el optimismo económico de las empresas cayó a un mínimo de cinco meses, dijo el banco en su último Barómetro de Negocios, lo que sugiere que sigue habiendo preocupación sobre las perspectivas generales.

Lloyds también llevó a cabo su estudio antes y después de las elecciones, y los datos posteriores a la votación que representan más de la mitad de las respuestas recibidas indican que el ánimo de las empresas ha decaído.