Los turistas procedentes de América del Norte y Europa optan por el turismo de naturaleza y aventura en la Amazonía peruana. (Foto: GEC)
Los turistas procedentes de América del Norte y Europa optan por el turismo de naturaleza y aventura en la Amazonía peruana. (Foto: GEC)

Perú se presentó ante la ITB, la mayor feria turística del mundo, centrada en la promoción de sus regiones del norte, donde hasta ahora el impacto del turismo es menor, y en busca del público europeo "responsable" hacia el medioambiente.

"Estamos por supuesto muy orgullosos del Machu Pichu y de la cultura inca. Pero aspiramos a una mayor diversificación de nuestra oferta, en lo que juega un gran papel el norte", explicó la viceministra de Turismo, Liz Chirinos, desde el estand peruano en la ITB, con unos 10,000 expositores de 180 países.

Perú recibió en el 2018 4.4 millones de turistas de todo el mundo -entre ellos, 81,000 alemanes, indicó por su parte Sandra Doig, subdirectora de promoción del Turismo Receptivo-, de los cuales aproximadamente un 20% se fue a las regiones del norte.

"Aspiramos a que ese porcentaje crezca a un 15% en los próximos años", indicó Chirinos, quien situó esa perspectiva dentro del objetivo marcado por su gobierno.

En lo que respecta al norte, se espera desempeñe una importante función el turismo de aventura, ámbito en el que esas regiones ofrecen "temas muy potentes".

El europeo que acude a Perú en busca de ese turismo de aventura "es cada vez más educado" y "responsable", añadió la viceministra, quien recordó que su país ha mantenido en los últimos años "fuertes estrategias" para evitar estragos medioambientales derivados de la actividad turística.

"Tenemos unas normativas descentralizadas", indicó, que se gestionan desde cada región y sólo se promocionan "ciertas aéreas", aquéllas donde, aseguró, se "dan el nivel y las condiciones precisas" para la actividad turística.

El hecho de que las regiones del norte sean fronterizas con Colombia -una superpotencia turística a escala continental- "ni nos perjudica ni nos ayuda", añadió, ya que la oferta peruana es muy distinta a la del vecino país.

En la estrategia para promocionar esas regiones peruana entra la mejora de la conectividad norte-sur, admitió Chirinos, donde Cusco, destino turístico de primer orden, desempeña un papel "fundamental".

La viceministra descartó, por lo demás, un efecto negativo sobre el sector de la preocupación europea por la crisis venezolana.

"No tenemos frontera directa con Venezuela, nuestro país ofrece una imagen de estabilidad económica y social", aseguró, para añadir que, además, Perú no sufre la situación de "desbordamiento", como Colombia, por la acogida de venezolanos llegados a su territorio.

Perú recibió el año pasado 367,738 venezolanos, según datos oficiales, la mayoría de los cuales entraron en el país con "perspectivas de trabajo concretas" y consiguen la incorporación a su mercado laboral, apuntó la viceministra.