(Foto: Shutterstock)
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Los pacientes oncológicos figuran entre los grandes afectados por las restricciones impuestas en a causa del , ya que hasta el 73% de ellos vio su tratamiento paralizado o limitado durante el año pasado, cifra que llega al 95% en el interior del país.

El cáncer era la principal causa de muerte en Perú antes de la .

Esta situación fue detectada en una encuesta nacional de la ONG Con L de leucemia, que ahora impulsa un “Pacto por la salud y el cáncer”, para que las autoridades den prioridad a la implementación de políticas públicas de atención a esta enfermedad, así como la aprobación por el Congreso de la Ley Nacional del Cáncer.

“Con la crisis del COVID y la pandemia, muchas personas se han dado cuenta de que el sistema de salud está mal estructurado y se tiene que cambiar”, afirmó Indyra Oropeza, la directora de esta organización dedicada a la educación en salud.

Encuesta nacional

A partir de la estricta cuarentena que se ordenó en Perú entre mediados de marzo y finales de junio del año pasado, por la primera ola de la pandemia, la ONG realizó la encuesta “Cáncer en tiempos de COVID-19”, que le permitió obtener resultados “bastante duros” sobre el tratamiento de las enfermedades oncológicas en el país.

En ese sentido, el 73% de los encuestados a nivel nacional “dijo que había tenido problemas o no había podido acceder” a su tratamiento, una situación que alcanzó al 42% de los pacientes de Lima y el Callao, donde se centraliza el tratamiento especializado, y que llegó hasta el 95% en otras regiones del país.

Oropeza puso de ejemplo que en el Instituto Nacional de Enfermedades Neoplásicas (INEN), donde ella se trata, se cortó todo el ciclo del tratamiento y “solamente atendían emergencias” para dar “paliativos para el dolor”, además de hospitalizaciones urgentes.

“A mi personalmente me suspendieron el tratamiento y no tuve hasta que se acabó la cuarentena”, remarcó.

Principal causa de muerte

Antes de la pandemia, el cáncer ya era la principal causa de muerte en Perú, con cerca de 40,000 decesos anuales, aunque Oropeza dijo que un informe del Observatorio Global del Cáncer (Globocan) indicó que los casos diagnosticados en el 2020 fueron unos 60,000 y las muertes “también han aumentado bastante”.

Ante el embate de la segunda ola del COVID-19, que comenzó con fuerza en enero pasado en el país, se establecieron estrictos protocolos para evitar que los pacientes se contagien y se reiniciaron todas las labores oncológicas en Lima.

Sin embargo, Oropeza aseguró que las personas diagnosticadas en provincias no pueden ser tratadas en sus lugares de residencia, al estar centralizado el tratamiento especializado en la capital.

Sin diagnóstico temprano

Entre los “grandes problemas” que también afrontan los pacientes oncológicos están las consecuencias de que en los últimos meses “no ha habido acceso al diagnóstico temprano de la enfermedad”.

La organización que preside Oropeza tiene actualmente diez pacientes en provincias diagnosticados con cáncer muy avanzado, por los que “ya se puede hacer poco o no se puede hacer nada”.

“Tenemos niños que están siendo diagnosticados tardíamente”, añadió la directora de la ONG antes de señalar que personas que el año pasado habían entrado en fase de remisión de la enfermedad, al no “tener acceso a tratamiento han recaído, muchas incluso han fallecido”.

Se dieron casos, además, de diagnosticados con cáncer poco antes de la cuarentena del año pasado que “se quedaron con cirugías, quimioterapias pendientes, y han fallecido esperando estos tratamientos”, lamentó.

Pacto por la salud y el cáncer

Ante esta situación, la ONG lanzó el 4 febrero pasado el “Pacto por la salud y el cáncer”, una iniciativa que invitó a firmar a candidatos al Congreso y a la vicepresidencia peruana en los comicios generales convocados para el próximo 11 de abril.

“Lo más importante es que los comprometemos a priorizar el cáncer, su manejo y control en la agenda política”, sostuvo Oropeza al detallar esta iniciativa, que también solicita que se fortalezca la Red Oncológica Nacional y se elabore un registro de pacientes con cáncer “que sea constantemente actualizado”.

Además, pide que los procedimientos de la Dirección General de Medicamentos, Insumos y Drogas (Digemid) “se aceleren muchísimo más para poder acceder a medicamentos innovadores”, así como la creación de una Comisión Nacional de Cáncer en la que se incluya a la sociedad civil y las asociaciones de pacientes.

La ONG promueve también la aprobación del proyecto de la Ley Nacional del Cáncer, que cuenta con el aval de la congresista Arlette Contreras, y está a la espera de su debate en el Congreso.

Mejor calidad de vida

Oropeza enfatizó que estas iniciativas buscan que “la calidad de vida” de los pacientes oncológicos y de sus familias “sea mucho mejor y que el acceso a la salud sea mucho más fácil” en Perú.

“Lo que la gente está sufriendo ahora con el COVID los pacientes (oncológicos) lo sufrimos desde el día en que nos diagnostican, antes de pandemia incluso”, acotó en referencia a la crisis que se presenta en los centros médicos ante la pandemia, que ya ha dejado más de 1.3 millones de casos y 47,000 fallecidos en su país.

Por ese motivo, consideró que ahora que sus compatriotas han comprobado “lo mal que está el sistema de salud”, tomarán “la decisión de cambiar las cosas”. “No esperemos otra pandemia para cambiarlas”, concluyó.