La región experimenta un fenómeno migratorio de alarmantes dimensiones, exacerbado por las gravísimas consecuencias de la pandemia de la COVID-19, señaló el Canciller Oscar Maúrtua. (Foto: Referencial/GEC)
La región experimenta un fenómeno migratorio de alarmantes dimensiones, exacerbado por las gravísimas consecuencias de la pandemia de la COVID-19, señaló el Canciller Oscar Maúrtua. (Foto: Referencial/GEC)

El Canciller Oscar Maúrtua señaló que el Perú era un país principalmente emisor de migrantes, pero que dicha situación ha cambiado dramáticamente dado que hoy acoge a más de 1.4 millones de migrantes y refugiados venezolanos (más del 20% del total) constituyéndose como el segundo país -después de Colombia- con mayor número de ciudadanos venezolanos en el mundo.

Así, dijo que esta situación, además de tener implicancias directas en la política interna, excede en muchos casos las capacidades nacionales de acogida. Al mismo tiempo, puso énfasis en la necesidad de efectuar acciones conjuntas y coordinadas entre todos los estados para atender esta problemática.

Necesitamos contar con una única agenda regional, sin duplicar esfuerzos, que permita abordar las complejidades del fenómeno migratorio, incluyendo los delitos conexos como la trata de personas, el tráfico de migrantes y refugiados, la violencia de género y la violencia contra los niños y niñas no acompañados”, señaló durante la Conferencia Ministerial sobre Migración realizada en la ciudad de Bogotá, República de Colombia.

Señaló que el Perú aborda el tema de la migración con un enfoque constructivo e innovador que propone soluciones inmediatas a través de la Mesa de Trabajo para la Gestión Migratoria, mecanismo de concertación, difusión y articulación con instituciones públicas en el plano nacional, regional y local, en coordinación con agencias del sistema de las Naciones Unidas, como la OIM y el ACNUR, y la sociedad civil.

Explicó que la región experimenta un fenómeno migratorio de alarmantes dimensiones, exacerbado por las gravísimas consecuencias de la pandemia de la COVID-19 que afectan aún más a los grupos vulnerables, por lo que la comunidad internacional debe tomar conciencia que ello constituye una crisis latinoamericana con proyección mundial.

En ese contexto, dijo, el país promueve una estrategia regional para la crisis humanitaria y migratoria, incluida la reinserción socioeconómica de los migrantes y refugiados venezolanos en los países de acogida, así como su acceso a los programas de vacunación y salud mental.

El Canciller concluyó su exposición reiterando el apoyo del Perú a soluciones estructurales de corto, mediano y largo plazo para resolver la problemática de la migración, así como el firme compromiso de nuestro país con la defensa de los derechos humanos y la promoción de la gobernanza democrática.

En el citado encuentro participaron los Ministros de Relaciones Exteriores de Colombia, Brasil, Canadá, Chile, Costa Rica, Ecuador, El Salvador, los Estados Unidos de América, Honduras, Guatemala, México, Panamá, República Dominicana y Surinam.