El próximo gabinete

La demora en la proclamación del JNE alarga la inquietud sobre quiénes serán los miembros del Gabinete Ministerial que acompañará a quien ejerza la Presidencia, y genera una serie de rumores.

Conocer los nombres de los nuevos titulares de las carteras resulta sumamente relevante porque permite hacerse una idea del rumbo que puede tomar el flamante Ejecutivo, aunque no siempre el primer gabinete es el que marca el camino. Y ejemplos de ello tenemos varios, como el primer gabinete del primer gobierno de Alberto Fujimori, por citar solo uno de ellos.

Obviamente, la mayor curiosidad –y nerviosismo– la provoca un eventual gabinete de Pedro Castillo, sobre el que se especula mucho. Pero estas especulaciones pueden tener mucho de buenos deseos, algo de verdad, y bastante de auto lanzamientos o de intentos de presión mediática.

Lo que sí es cierto es que son dos los factores que han determinado la conformación del eventual gabinete de Pedro Castillo: i) la relación Pedro Castillo-Perú Libre (léase Vladimir Cerrón); ii) y la aceptación de las propuestas “irrenunciables”.

Han sido muchos los esfuerzos por separar a Pedro Castillo de Vladimir Cerrón. Incluso muchos han señalado –en varias ocasiones– que el primero ya marcó distancia del segundo, y que ya se habría entregado a los brazos de sus aliados. Si esto es así, es válido pensar que el gabinete estará integrado por más invitados –empezando por PCM– que miembros de Perú Libre.

Pero si la relación es aún fuerte, con Cerrón y con Perú Libre (y realmente no hay razones para pensar lo contrario, aunque muchos crean, quieran o promuevan otra cosa), entonces la mayoría de los ministerios –empezando por PCM- estarán ocupados por gente de Perú Libre o muy cercana a ese partido y a Tacabamba.

Seguramente los ministerios más importantes y con mayor impacto en la población estarán reservados para ellos, bajo la lógica de “Perú Libre ganó y es el que va a gobernar”. Lo cual no sería extraño, considerando además lo que piensan y sienten Vladimir Cerrón (que ayer los llamó caviares que cobran millonadas en consultorías al Estado) y Pedro Castillo por varios de sus aliados desde hace buen tiempo.

El caso del MEF puede ser una excepción, ya que en Perú Libre o alrededores no hay una figura como Pedro Francke, por ahora.

El otro factor es el de las propuestas “irrenunciables”. Para ser ministro hubo que aceptar las propuestas “irrenunciables”. A algunas pocas personalidades –de otros partidos o independientes– que fueron “sondeadas” o consultadas para integrar el gabinete se les habría planteado que esas propuestas (como la de la Asamblea Constituyente, y algunas otras que formaron parte del discurso de la primera vuelta) serían impulsadas desde el primer día. Esto ahuyentó a algunos y a otros les generó tremendas dudas.

Pero, ¿por qué llamar independientes o “moderados” –incluso hasta neoliberales- si pretenden impulsar sus propuestas irrenunciables?, ¿por qué no quedarse solo con la gente de Perú Libre o los aliados?

Quizás por la misma razón por la que piden que Julio Velarde se quede. Los gobiernos –de cualquier signo- que empiezan su mandato necesitan generar confianza y estabilidad, que buscan con gestos y algunos nombramientos que den cierta tranquilidad al mercado. Buscan “figurones”, como nos dijo uno de los consultados. Dependiendo del rumbo que tome el Gobierno, al poco tiempo estos “figurones” van perdiendo relevancia o terminan renunciando.