CADE 2018
CADE 2018

CADE 2018. Hoy se inicia una nueva edición de la Conferencia Anual de Ejecutivos (CADE), y la propuesta de este año es “liderazgo empresarial por un Perú moderno”. Si bien se mantiene la sensación de que esta reunión anual se ha convertido en un listado de pedidos y buenas intenciones, pero sin mayores resultados, IPAE tiene una nueva oportunidad para impulsar un debate de propuestas.

Hace cinco años, en un intento por cambiar esa imagen, la edición de la CADE 2013 culminó con una lista de compromisos concretos que los empresarios asumían en algunos sectores clave. Por ejemplo, en materia de educación, una de las metas fue crear el primer Observatorio Educativo-Laboral con el fin de romper el divorcio entre la academia y la demanda de trabajadores, el cual pudo ver la luz recién a mediados del 2015. La propuesta inicial fue plantearse metas desde el sector privado e ir revisándolas año a año. Lamentablemente, este intento de parafrasear a John F. Kennedy –“No preguntes qué puede hacer tu país por ti, sino qué puedes hacer tú por tu país”– no tuvo el suficiente eco que se requería.

Hoy, las primeras dos conferencias estarán dedicadas a cómo combatir la corrupción y el soborno, a nivel empresarial, que es un tema que sin duda merece abordarse con mucho interés, pues el escándalo de Lava Jato dejó muy mal parada a una parte del sector empresarial peruano, y la respuesta, tanto a nivel gremial, como en casos individuales, no ha tenido la contundencia esperada por la población. Así como César Azabache reconoce que los abogados, como comunidad, están en deuda con la sociedad por haber sido parte del sistema que dio espacio para que cosas como la mafia de los llamados “cuellos blancos” existan, sería conveniente escuchar a los representantes gremiales ofrecer las disculpas correspondientes. Las sanciones éticas gremiales siguen brillando por su ausencia.

El viernes, se debatirán los lineamientos de la Política Nacional de Competitividad elaborada por el MEF, y el Consejo Privado de Competitividad presentará las propuestas para alcanzar una mayor productividad. En Paracas, el sector privado tendrá la posibilidad de realizar una autocrítica a su comportamiento, sin que eso signifique dejar de lado su derecho a exigirle al Gobierno las herramientas necesarias para crecer y sobre todo para que el desarrollo del país alcance a más peruanos.

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