MENSAJE. Poco afecto a conversar con la prensa, el presidente Pedro Castillo prefirió dar un mensaje a la Nación para comunicarse con los ciudadanos, haciendo un recuento de ofertas ya conocidos como la entrega de un nuevo bono de apoyo familiar -hoy con otro nombre: “Yanapay”- de S/ 350 o la generación de 260,000 mil empleos temporales.
Quizá uno de los temas puntuales más esperados era el que busca reducir el precio del GLP. Ya el ministro de Economía había anunciado que evaluaban para elegir la mejor opción entre “el Fondo de Estabilización de Precios de los Combustible (FEPC), que tiene un costo fiscal alto”, y “el Fondo de Inclusión Social Energético (FISE), que es un bono adicional que se paga a las familias más necesitadas para que compren el gas”. Lamentablemente, la vía usada no solo es costosa, sino que sus efectos sobre el precio final del balón de gas no serán los esperados por el Gobierno y beneficiará sin distinguir de los que realmente lo necesitan. Usar el FISE pudo ser más eficiente.
Otro anunció fue el de la generación de empleos temporales. Sin embargo, en momentos en que se han perdido millones de puestos de trabajo, 260,000 empleos temporales solo atenúan la situación sin atacar el problema de fondo. Castillo habló de la inversión pública, pero olvidó que es la inversión privada la que genera el empleo formal y que para que esta inversión crezca necesita de un escenario de tranquilidad y predictibilidad que hoy no se tiene. Sin ello, la recuperación de los empleos perdidos y la creación de nuevos puestos no se dará, afectando la sostenibilidad de los ingresos de la ciudadanía.
Por otra parte, si bien la posibilidad de que se construya una planta para la elaboración de vacunas en el Perú suena importante, la falta de concreción en el anunció le resta fuerza. Primero se dijo que podría estar lista en 2023, pero luego el propio ministro de Salud reconoció que aún no hay definición de plazos.
Finalmente, el mandatario decidió ignorar los temas políticos que desde hace semanas preocupan a gran parte de la población como el futuro de su ministro de Trabajo, un tema que no es menor, sobre todo cuando hay inquietud respecto a los proyectos laborales que están en el Congreso y a las declaraciones del propio titular del MTPE, como el del incremento del sueldo mínimo.
No pasan de ser medidas aisladas lo dicho por Castillo, sin una visión global de los problemas, que si bien pueden resolver temas coyunturales, no necesariamente van a generar el impacto esperado.