Futuro inmediato

ECONOMÍA. La última encuesta de Datum muestra que un 84% considera que las medidas económicas que el Gobierno viene aplicando son insuficientes. Esta percepción es superior a la que se tenía hace dos meses, y cuando se les pregunta a las personas cuál es su principal problema personal y familiar la falta de empleo y que el dinero no alcanza son los que destacan. Eso sumado a que un 51% señala que aún no consigue trabajo muestra que contar con ingresos suficientes es la mayor necesidad de los peruanos.

El fracaso en la distribución de los bonos otorgados por el Gobierno y la falta de una política económica eficiente para combatir el impacto del covid han perjudicado más a los sectores de menores ingresos, pues terminan trabajando en el sector informal, con pocas medidas de seguridad sanitaria. Ante la ineficacia del MEF, el tema se puede agravar porque la recuperación -ya ni hablar de la reactivación- se va a dar principalmente por los sectores primarios (minería y pesca), que son menos intensivos en mano de obra.

Si bien el déficit fiscal ha aumentado, existen dudas de que el gasto haya sido eficiente en términos de haber llegado a quienes debía y no hay una trayectoria fiscal de cómo hacer para su recuperación, aunque sea en el largo plazo. Desde esta columna, hemos reclamado que el MEF ya debió contar con un plan claro de la ruta que debe seguir.

Por cierto, el MEF parece estar esperando hasta el último día de agosto para dar a conocer el Marco Macroeconómico Multianual, en el cual debe fijar las expectativas económicas para este año y para el próximo. Pero aun con sus falencias y con el declive de la popularidad de la titular del sector -lo cual por lo general ocurre con todos los ministros de Economía- más cambios no necesariamente moverán la aguja. Lo que queda es exigirle eficiencia y mayor proactividad en las respuestas de política económica.

Pero hay un punto político que el nuevo Gabinete -y María Antonieta Alva- no puede obviar: el Congreso y el trabajo político que debe realizar. Por lo pronto, ayer el presidente del Parlamento adelantó las interpelaciones contra los ministros Benavides y Alva, y que de no responder las preguntas podrían ser censurados.

La lección que le debe haber dejado al Gobierno lo sucedido con el voto de confianza al Gabinete Cateriano es que la preocupación por la crisis económica, siendo un tema importante, no puede ser mayor que la preocupación por la salud. Ambos sectores deben tener la misma importancia para el presidente Vizcarra.