Editorial de Gestión. El respeto irrestricto a la libertad de expresión y la separación de poderes no debe ser afectado. (Foto: GEC)
Editorial de Gestión. El respeto irrestricto a la libertad de expresión y la separación de poderes no debe ser afectado. (Foto: GEC)

LIBERTAD Y SEPARACIÓN DE PODERES. En las últimas 48 horas el país ha sido testigo de dos hechos que no merecen ser pasados por alto. El primero es la nada velada amenaza publicada en el Twitter oficial del partido Perú Libre contra la libertad de prensa y el segundo es el fallo del Poder Judicial que ha suspendido la elección de magistrados del Tribunal Constitucional (TC).

En el primer caso, a pesar de que tanto los voceros como el propio Pedro Castillo señalan que se investigue lo que se tenga que investigar en el caso de “Los Dinámicos del Centro”, oficialmente el partido parece querer desconocer el trabajo que viene realizando la Fiscalía y, por el contrario, buscan culpar a los medios de comunicación señalando que “necesitamos una ley de medios y terminar con estos extorsionadores”. Esta declaración hace pensar que la imagen de que un gobierno liderado por el candidato estaría alejado del ideario de Perú Libre ya no va más.

En el segundo caso, el Tercer Juzgado Constitucional Transitorio de la Corte Superior de Lima decidió ordenar al Congreso la suspensión de la elección de magistrados del TC programada para el 7 y 8 de julio en una cuestionada decisión que afecta la separación de poderes. La elección de magistrados es una prerrogativa del Parlamento, aun cuando se pueda estar en desacuerdo con la oportunidad de la elección o los candidatos que puedan quedar en contienda, lo cierto es que no le corresponde al Poder Judicial intervenir en el mismo.

Abrir la puerta a dicha posibilidad implicaría que el Poder Judicial podría impedir la elección del contralor general de la República, o a los miembros del directorio del BCR, ¿y qué sucede si el Poder Judicial decide impedir la elección del presidente del BCR a cargo del Poder Ejecutivo o quizás paralizar la proclamación de los resultados de la segunda vuelta, que está a cargo de JNE?

La idea de vivir en democracia implica el respeto a la legalidad y la legitimidad, las cuales se están tirando por la borda. La libertad de opinión y, por consiguiente, la libertad de prensa se deben respetar aun cuando no se compartan las ideas e, incluso, cuando se expresen ideas contrarias a las propias. Asimismo, las instituciones deben respetarse a pesar de que se tomen decisiones con las que no se está de acuerdo. Si no se cumplen las normas o se violan los procedimientos existen los mecanismos adecuados para canalizar las objeciones, pero sin violentarlas.

El respeto irrestricto a la libertad de expresión y la separación de poderes no debe ser afectado.

TAGS RELACIONADOS