Redacción Gestión

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INFLACIÓN. El BCR no tendrá que esmerarse con mucho ahínco en anclar las expectativas inflacionarias. Por lo menos durante un tiempo, pues la variación del índice de precios al consumidor para Lima Metropolitana ya no causa tanta preocupación, salvo que la tasa negativa de agosto (0.09%) se convierta en tendencia y surjan temores de una deflación, lo cual sería toda una novedad para un país que tiene experiencia en lo contrario.

Según el INEI, la inflación estuvo descendiendo gradualmente entre marzo y junio. El ligero salto de julio no provocó muchos sobresaltos pues la tasa anualizada siguió convergiendo hacia el rango meta del BCR. No sería necesario efectuar ejercicios econométricos muy sofisticados para verificar si ese comportamiento guarda correlación con una menor demanda interna. De hecho, el instituto emisor revisó a la baja su proyección de ese indicador para este año (de 5.4% a 4.7%).

Y ahora que agosto se fue con una canasta de bienes y servicios más barata, habría que esperar que en el BCR reine algo de calma que permita a sus técnicos y directivos concentrarse en manejar sus herramientas de política monetaria para menesteres complementarios a la estabilidad de precios. No hay que olvidar que la propia entidad no prevé futuras presiones de demanda que alteren la evolución de la inflación para este y el próximo año.

Es más, el presidente del BCR, Julio Velarde, ha declarado desde Madrid que el resultado del mes pasado "obviamente da un mayor margen para la política monetaria", lo que significa la posibilidad de más medidas expansivas de la liquidez. Entre ellas, la que goza de las preferencias de los agentes económicos en general y del sistema financiero en particular, porque su impacto va más allá de las bóvedas bancarias, es la tasa de referencia.

Ya algunos analistas se han adelantado en vaticinar que este mes sí se reducirá y aunque no siempre aciertan –en agosto, por ejemplo–, el BCR haría bien en convertir ese cuarto de punto porcentual en un nuevo incentivo, pues la economía sigue urgida de señales positivas. Lo sabremos el jueves de la próxima semana.