Redacción Gestión

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TENSA SITUACIÓN. El panorama para la poco a poco empieza a aclararse, pero solo en lo que respecta a factores económicos, ya que los riesgos geopolíticos cobran fuerza desde hace unas semanas.

Si bien la tuvo un traspié en el primer trimestre, cuando se contrajo 2.9%, todo parece indicar que la recuperación estaría encaminada, aunque no al ritmo deseado. En cuanto a la Unión Europea, queda claro que lo peor ya pasó, y si bien aún existe un débil crecimiento, cada vez son más los países miembros que evidencian mejoras lentamente.

, la gran importadora de las materias primas de Latinoamérica, también parece haber conseguido un cierto equilibrio entre las reformas que se pretende implementar y el compromiso de alcanzar la meta de crecimiento anual de 7.5% para este año.

Pero, si bien, esos factores ayudan a mejorar las perspectivas para la economía mundial, la acentuación de la crisis en , la intensificación del conflicto entre Israel y los palestinos, y la mayor violencia en Irak y Libia, vienen captando ahora la atención de los mercados.

El derribo de un avión comercial con 298 personas en Ucrania amenaza con tensar más la relación de con Occidente, e incluso el riesgo de mayores sanciones para Moscú. El impacto inicial de la crisis es un crecimiento nulo de Rusia para este año y su repercusión en la economía de Alemania, país que lideraba la recuperación en la eurozona. La situación podría complicarse con la llegada de nuevas sanciones para Rusia, al punto de comprometer la mejora de la .

En cuanto a los conflictos en Medio Oriente, a diario aumentan las víctimas por la incursión militar de en . Una situación similar ocurre en los enfrentamientos en Irak y Libia, zonas eminentemente petroleras, lo que puede llevar a incrementar los precios internacionales del crudo y mellar el crecimiento mundial. Esos llamados riesgos geopolíticos apuntan a ganar mayor protagonismo en un año en que se espera que se consolide la recuperación global.