El acuerdo sobre derechos de pesca ha sido uno de los puntos más conflictivos en las negociaciones para lograr un acuerdo comercial, algo que no se ha logrado desde que Reino Unido abandonó formalmente la UE en enero después de 47 años. (Foto: AFP)
El acuerdo sobre derechos de pesca ha sido uno de los puntos más conflictivos en las negociaciones para lograr un acuerdo comercial, algo que no se ha logrado desde que Reino Unido abandonó formalmente la UE en enero después de 47 años. (Foto: AFP)

El brazo ejecutivo de la presentó el jueves planes de contingencia para un sin acuerdo a fin de año, en busca de minimizar la interrupción del tráfico aéreo y los viajes terrestres después de que las conversaciones entre los líderes británicos y de la UE no superaron un estancamiento.

La Comisión Europea también propuso que Gran Bretaña y la UE continúen ofreciendo acceso recíproco a sus aguas de pesca por un año, pero Londres rápidamente rechazó la idea.

El acuerdo sobre derechos de pesca ha sido uno de los puntos más conflictivos en las negociaciones para lograr un acuerdo comercial, algo que no se ha logrado desde que abandonó formalmente la UE en enero después de 47 años.

El primer ministro Boris Johnson y la presidenta del ejecutivo de la Unión Europea, Ursula von der Leyen, se dieron como plazo hasta el domingo por la noche para sellar un pacto de comercio, luego de no poder superar las persistentes disputas durante una “animada” cena el miércoles.

Gran Bretaña le dijo a la UE que debería hacer concesiones importantes para salir del punto muerto en la negociación comercial del hacia el final de la semana o entregar alguna claridad sobre cómo se conducirá el final de la crisis de divorcio, que ya lleva cinco años.

“Claramente aún hay cierto espacio para seguir charlando pero existen puntos significativos de diferencias que persisten”, dijo el ministro de Relaciones Exteriores británico, Dominic Raab, a la cadena BBC, y añadió que las dos partes necesitaban evaluar la situación el fin de semana.

“Creo que el domingo será un momento importante”, dijo Raab a Sky News. “Nunca se dice que nunca en estas negociaciones, pero creo que necesitamos cerrar algo”.

Raab dijo que los principales puntos de dificultad -la pesca y los compromisos sobre negocios comerciales en igualdad de condiciones- lograron acotarse, pero existen asuntos que “por principio” Gran Bretaña quiere establecer.

“Se necesita un cambio sustancial”, declaró el ministro, para que ambas partes puedan continuar las negociaciones después del domingo.

Gran Bretaña dejó formalmente la UE en enero, pero desde entonces ha estado en un periodo de transición en el que sigue siendo parte del mercado único del bloque y de la unión aduanera, lo que implica que las normas de comercio, viajes y negocios siguieron siendo las mismas.

Este periodo finaliza el 31 de diciembre. Si para entonces no se llega a un acuerdo que proteja de aranceles y cuotas alrededor de US$ 1 billón en intercambio comercial, las empresas de las dos partes experimentarán serios problemas.

La ausencia de un acuerdo tendrá implicancias para cualquier negocio europeo y británico, impactará a los mercados financieros, generará confusión en las fronteras y alterará las cadenas de suministros en una región que ya está lidiando con los graves costos económicos y humanos de la pandemia del COVID-19.